El Lointek Gernika despide la temporada en Zaragoza

Los seis puntos de renta que llevaban las gernikarras se han antojado insuficientes frente a un conjunto rival que ha puesto toda la carne en el asador desde los primeros compases. Ha pasado toda la presión a las visitantes que, lejos de mostrar su versión más sólida, han necesitado muchos minutos para gestionar la situación. A falta de treinta segundos para la conclusión del choque, el Lointek Gernika se ha colocado ocho puntos abajo, pero para entonces sus jugadoras ya estaban muy desgastadas y no han sabido apurar sus opciones.

Pero el origen del adiós ha estado en la primera parte. Las visitantes necesitaban aguantar el primer arreón de un equipo que iba a salir con todo y no lo han hecho. A pesar de que ambos conjuntos han necesitado algún tiempo para templar los nervios, las locales lo han hecho antes y han endosado un parcial de 11-0 en los primeros seis minutos que ha resultado complicado de digerir para las entrenadas por Anna Montañana. Para entonces Da Silva ya tenía dos faltas personales y las anfitrionas tenían el partido donde querían por las dudas que han generado en sus rivales. Las granate han necesitado un minuto más para lograr su primera canasta y enmendar algo la situación, pero sin triples y con unos porcentajes bajos de lanzamiento ha resultado muy complicado ir más allá.

En el segundo cuarto tampoco se ha mejorado mucho la situación porque el Zaragoza quería romper el choque y ha aumentado su presión defensiva. Ha vigilado muy de cerca a Yguravide y ha conseguido estar más fluido en ataque. De esta forma ha madurado a las vizcaínas, que no han sumado un solo punto en tiros lejanos y seguían sin reconocerse sobre la cancha. La desventaja se ha disparado hasta los 18 puntos poco antes del descanso.

El paso por los vestuarios ha servido para clarificar ideas y el arranque del tercer cuarto ha sido esperanzador. Se ha conseguido cerrar mejor la pintura y han empezado a ver el aro con mayor asiduidad. Aunque faltaba claridad de ideas en ataque, se han encontrado soluciones para apretar al Zaragoza. Un 4-10 de parcial ha devuelto la esperanza a las visitantes y en el ecuador se han colocado diez abajo, pero les ha faltado creérselo y saber moverse mejor en el barro. Jugadoras como Ygueravide y Wojta se han cargado de faltas y el equipo no ha tenido la consistencia suficiente.

En el último ha tocado remar contra una corriente que cada vez era más fuerte, pero las granate han sacado fuerzas para mantener el pulso. El Casademont Zaragoza ha sabido aguantar bien con canastas clave que le han dado mucho aire. Un triple a tabla de Ygueravide ha puesto a las vizcaínas a ocho puntos de diferencia a falta de medio minuto para la conclusión, pero han faltado recursos para dar el último paso al frente que les permitiera seguir vivas en la competición.