Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
JUAN PABLO MARTÍN
Jueves, 29 de noviembre 2018, 00:13
Estaban avisadas, pero resultó imposible. La derrota entraba dentro de las posibilidades, pero no con semejante diferencia. El Spar Cityflitf Girona pasó por Maloste como un huracán y se llevó todo lo que encontró por medio. El Lointek Gernika tendrá que esperar para ... plantar cara a su 'bestia negra' en la EuroCup Women. Este miércoles tampoco pudo con ella. Necesitaba su mejor versión y no la dio. Sus sensaciones no fueron buenas en prácticamente ningún momento y contra rivales de este calibre son necesarias los cuarenta minutos. Las catalanas, por su parte, terminaron satisfechas con el trabajo realizado, señal de que tuvieron el choque controlado casi siempre. Llegaban a la villa foral con la intención de ratificar su primera plaza de grupo por los beneficios que acarrea en la siguiente fase de la competición y se mostraron como un rival muy sólido y con las ideas muy claras en todo momento. Y si un rival se gusta sobre el parqué la exigencia se multiplica.
Las gernikarras ofrecieron una versión bastante vulnerable. No dieron la versión física que esperaba su entrenador, le costó un mundo superar la propuesta de sus rivales en ataque y en defensa tampoco fueron el conjunto compacto de la competición doméstica. Desde los primeros instantes las vizcaínas pudieron comprobar cómo se las gastan las de Eric Suris. Ambos conjuntos estuvieron bastantes finos atrás y la diferencia estuvo en el aspecto ofensivo. Era necesaria una constancia en este sentido para evitar que las catalanas adquirieran una ventaja complicada de sufragar, porque cualquier error ante conjuntos de este calibre se paga. Las dirigidas por Mario López aguantaron bien en los primeros minutos, aunque los problemas para entrar en la zona rival eran muchos y tuvieron que esmerarse desde fuera. Sin embargo, las situaciones de tiro no fueron todo lo cómodas que les gustaría porque los bloqueos tampoco resultaron buenos.
Lointek
Vanderwal (5), Christinaki, Gwathmey (16), Roundtree (7), Berezynska (14) -cinco inicial-; Díez (3), Molina, Mazyonite, Pascua (2), Ariztimuño.
47
-
78
Girona
Martínez (9), Palau (2), Murphy (7), Hampton (21), Colhado (18) -cinco inicial-; Buch (5) Reisingerova (7), Oma (9), Martín.
Parciales : 11-21, 20-22 (31-43), 9-18 (40-61), 7-17 (47-78)
Árbitros : Rohacky (AUS), Jacobs (BEL), Sentürk (TUR).
Las visitantes por el contrario encontraron más alternativas en ataque y, poco a poco, comenzaron a abrir un hueco. Hampton empezó a hacer daño desde casi cualquier sitio, y al finalizar el acto la desventaja era de once puntos. Los porcentajes de lanzamiento de las gernikarras no alcanzaron los registros deseados.
En el segundo cuarto, un triple de Gwathmey y un buen movimiento de Berezinska volvió a meter a las anfitrionas en el encuentro. Mario López propuso una zona que dio sus frutos al principio, pero las catalanas tuvieron capacidad suficiente como para no permitirse muchas más concesiones. Vanderwal desde la larga distancia redujo la diferencia a cinco, pero no hubo continuidad.
Las que sí la tuvieron fueron las del Girona que tuvieron la paciencia suficiente para buscar y encontrar los huecos y volvieron a abrir distancia en el luminoso. La lesión de Juana Molina, menisco en principio, tampoco ayudó a la moral de la tropa y algunas faltas innecesarias también supusieron castigo extra para las gernikarras, que alcanzaron el descanso doce abajo.
Había que reaccionar tras la reanudación si se quería tener alguna opción de volver a entrar en el choque y crear alguna duda en las catalanas, pero tampoco se logró. El tercer acto sirvió a las de Eric Suris para romper definitivamente el choque y dar una lección de juego coral.
El Lointek Gernika fue un manojo de dudas que favoreció el despegue definitivo de sus rivales. Necesitó seis minutos para hacer su primer canasta, mientras que el Girona fue un rodillo perfectamente engrasado con Colhado de estilete, pero bien secundada por sus compañeras. El encuentro estaba roto, por lo que en el último cuarto tocó aguantar el chaparrón. El Lointek Gernika bajó los brazos, mientras que el Girona terminó por gustarse. No bajó el acelerador en ningún momento y su victoria fue más abultada que la que obtuvieron en su casa contra la vizcaínas. Toca resetearse y levantar la cabeza de cara a la competición doméstica. En la continental todavía quedan opciones, aunque una derrota así duela.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.