Courtney Williams, nueva escolta del Lointek Gernika

Eléctrica, con una gran capacidad de anotación y un uno contra uno destacable, son algunas de las características del juego de la estadounidense, titular en la WNBA con los Connecticut Sun. Con 24 años y 173 centímetros destaca por su velocidad, cambios de ritmo, manejo de balón, capacidad para generar juego y crear sus propios puntos. Responde a la perfección al perfil que buscaba el técnico de la villa foral después de la marcha de uno de los pilares del equipo como la portorriqueña. No es un tres alto como ella, pero es una buena pieza para completar una escuadra que tiene que reinventarse tras perder a dos jugadoras muy importantes por diferentes razones.

Formada en la Universidad de Florida, tuvo una actuación brillante en su etapa universitaria y acabó su último año con 22,4 puntos lo que le valió ser elegida número 8 del draft de 2016 por las Phoenix Mercury –en el mismo draft en el que Banham, la anterior incorporación en las filas de las granates tras la marcha de Dietrick, fue número 4–. Jugó en el equipo de Arizona 6 encuentros y recaló en las Connecticut donde pronto reclamó el protagonismo y fue una de las jugadoras con las peso. En la última campaña ha promediado 12,6 puntos y la destacable cifra de 5,9 rebotes pese a su estatura.

Esta temporada Williams también ha jugado en el Dike Napoli de la Serie A1 italiana, pero la escuadra desapareció en Navidad en plena competición. La aportación de la nueva escolta del Lointek fue de 16,3 puntos y 8 rebotes en los 9 encuentros que disputó con la camiseta napolitana.

«Puede alternar las posiciones de uno y dos, destaca por su velocidad, la capacidad para generar y fabricar sus propias canastas, que es algo que con la marcha de Dietrick y Gwathmey el equipo había perdido», destaca el técnico de las gernikarras. Sus características también le permite atraer defensas y es un «buen contrapunto a las buenas tiradorasque tenemos para generarles situaciones de tiros liberados y juego sin balón para las pívots», añade.

Williams tiene muy poco margen para conocer los sistemas y automatismos del juego del Lointek Gernika porque el viernes arranca la Copa para las vizcaínas. Pero el entrenador espera que «su adaptación sea rápida porque es una buena escolta y este tipo de jugadoras necesitan menos tiempo para conseguirlo. Compartir vestuario con Banham es algo que le puede ayudar», concluyó.