El carácter no entiende de fatigas

Hubo que tirar de táctica visto que el motor no estaba en plenitud de condiciones. Bajar las revoluciones para que la gasolina llegara para los cuarenta minutos y jugar con mucha cabeza y apostando por sus puntos fuertes. La paciencia también se explotó a la perfección ante el reto que tenían delante con constantes cambios para minimizar los esfuerzos y que las ideas fluyeran con la mayor naturalidad posible. Y sin la colaboración de Colhado que no pudo jugar por una lesión. De esta forma se desbordó al conjunto de la isla que casi nunca pudo con la propuesta de las gernikarras.

La solidez defensa volvió a ser innegociable y de esta forma se comenzó a ganar un encuentro en el que la efectividad en el lanzamiento, sobre todo en el primer cuarto dio un plus añadido a las de la villa foral. Se trabajó mucho y bien porque casi nadie desentonó en una actuación coral. Se encontraron buenas posiciones de tiro, se percutió en la pintura y se apostó por la verticalidad en momentos puntuales. Se consiguió que el conjunto isleño tuviera demasiadas lagunas atrás, y para cuando quiso corregir la situación fue demasiado tarde.

Aunque conocía sus limitaciones, el Lointek Gernika encontró alternativas desde el primer cuarto. Cerró su zona con buenas ayudas y anticipación, y el Tenerife se fue diluyendo conforme pasaban los minutos por su falta de fluidez. Fue un proceso de maduración del rival constante. Con ataques en el que se movió el balón con mucha claridad y los cuatro triples cosechados en el primer acto colaboraron a mantener la delantera en el luminoso en el primer acto.

En el inicio del segundo se ratificaron las sensaciones con un parcial de 14-3 en los primeros siete minutos que permitió que las vizcaínas comenzaran a pensar en que era posible. Los cambios defensivos funcionaron y en ataque se consiguió una buena efectividad también desde la media distancia. Fue tras el tiempo muerto solicitado por el técnico tinerfeño, Claudio García, para tratar de parar a sus rivales cuando sonaron algunas luces de alarma porque se encajó un 0-7 de parcial en el que las granate bajaron algos sus prestaciones. A pesar de todo, un triple de Corneluis hizo que se retirarán al descanso con 15 puntos de ventaja.

Tras la reanudación estaba por ver cuanto le iban a pesar las piernas a las vizcaínas, pero fue en el tercer cuarto donde dejaron prácticamente sentenciado el choque. El Ciudad de La Laguna no fue capaz de parar a sus rivales, mucho más enteras, y con un juego fluido las gernikarras ampliaron su diferencia a los 20 puntos en el ecuador porque tuvieron recursos suficientes contra la zona rival. Sin desequilibrios atrás, mermaron la resistencia de las de la isla que terminaron por casi apagarse.

En el último cuarto fue cuestión de sostener el trabajo realizado y evitar cualquier atisbo de reacción. Se notó el cansancio, pero se mantuvo la mente fría y se gestionó bien a un conjunto rival con demasiados altibajos en su juego que tuvo que hincar la rodilla.