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Pese a pasar una temporada complicada ha quedado entre las ocho mejores del mundo. La pamplonesa Izaskun Osés participó el jueves en su primer Mundial Paralímpico bajo el calor abrasador de Dubai. Su objetivo, conseguir el pase para los Juegos de Tokio 2020, ... se le escapó por poco a la navarra, que ya se colgó el bronce en los 1.500 metros en Río 2016, en la que a diferencia de otras atletas invidentes o con problemas de visión participa sin guía. No obstante, ya aguarda nuevas oportunidades.
Osés, quien antes de dedicarse al atletismo llegó a ser campeona de España de taekwondo, ha sabido sobreponerse a una miopía magna degenerativa y un glaucoma. En estos últimos meses ha hecho frente a varias lesiones, se ha convertido en mamá y, antes de marchar a Dubai, contrajo una mononucleosis, pero eso no le ha impedido demostrar los resultados de su entrenamiento en la pista. «Pensé que el calor iba a ser todavía peor pero, por suerte, aunque las mañanas eran calurosas por las tardes refrescaba un poco», confiesa la atleta de 35 años.
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El arranque de la carrera fue complicado para Osés y, finalmente, completó la prueba de Dubai -1.500 metros en categoría T13 por su discapacidad visual- en 4:58:30. Por el número de participantes la prueba debía haber contado con semifinal y final, pero debido al calor únicamente se disputó una carrera en la que se impuso la marroquí Fatima El Indrissi con 4:39:62. Este es su regreso a la competición al más alto nivel, y seguirá peleando por obtener una plaza para Tokio 2020 en pruebas oficiales. La mínima para acudir al país nipón se encuentra en 4:37 minutos. «Veré dónde puedo conseguir la marca, y en junio estaré en el Campeonato de Europa, que se celebrará en Polonia», avanza Osés.
Tras esta experiencia en el Mundial de Dubai, Osés se reafirma en su apuesta por volver a la pista y representar a España en Tokio 2020. Es por ello que EL CORREO ha decidido nombrarla 'Campeona de la semana'. La corredora, que se convirtió en una deportista paralímpica en 2016, poco antes de debutar en sus primeros Juegos Paralímpicos, mantiene el control sobre la pista pese a su discapacidad visual, pero el diagnóstico le hizo abandonar otras facetas de su vida como la profesional.
Osés tuvo que dejar de ser enfermera en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Navarra, pero afirma que, después de participar en el Campeonato del Mundo, sólo quiere «seguir corriendo, más», y que se reconozca el trabajo de los atletas paralímpicos. «Los Juegos Paralímpicos son tanto o más sacrificados que los Juegos Olímpicos pese a que tengan un menor nivel de seguimiento, y que el París 2024 haya puesto el mismo logo para ambas competiciones es un gran gesto», aplaude Osés.
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