5.562 seguidores vibran con el Lointek en el Bilbao Arena

Javier Muñoz

Sábado, 4 de enero 2020, 23:09

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Un año de récords sucede a otro. Una riada de familias aficionadas al basket, llegadas en grandes grupos desde el Casco Viejo y desde el barrio Miribilla, han cubierto esta tarde en el Bilbao Arena, a partir de las 16.45, una hoja de ruta que, en 2019 por estas fechas, trazaron las futbolistas del Athletic en San Mamés ante el Atlético y que ellas mismas van a completar mañana a mediodía con su cita liguera ante el Barça en el mismo escenario. Es un movimiento de cambio, en el que el Lointek Gernika toma el testigo esta vez. El club había logrado distribuir esta semana más de cinco mil entradas para el partido contra el Mann Filter Casablanca de Zaragoza en el mismo pabellón donde el RETAbet jugará un poco después contra Estudiantes. Y el aforo ha sido de 5.562 personas, apenas a un paso de los seis mil aficionados que las gernikarras se propusieron alcanzar tocando a rebato a la afición.

Si algo ha quedado de manifiesto hoy en las gradas y la cancha del Bilbao Arena, una infraestructura pública, es que se nutren de sabia nueva y son ocupadas en igualdad de condiciones por un equipo femenino y uno masculino. Hay quienes subestiman estas iniciativas de arrastrar al público para llenar recintos deportivos. En realidad crean dinámicas, hábitos de asistencia a espectáculos deportivos. Descubren ambientes diferentes y consiguen que aflore una afición nueva, una que renueva la audiencia alrededor de la cual ha pivotado desde hace décadas el deporte de competición.

Cuadrillas enteras de chavales, identificables por sus gorras granates, familias al completo, compañeros de colegio, dieron un aire fresco a la cita del Lointek, una escuadra de basket femenino que pelea en la liga contra clubes con más medios y que compite con dignidad en Europa. Una entidad que hoy ha multiplicado su pequeña afición de Gernika, una masa bulliciosa de cientos de personas que ha salido de su cancha de Maloste para exhibirse en el Bilbao Arena y hacer lo que mejor sabe, pasárselo bomba con una competición de élite, animando a una escuadra que tiene un gran margen de progresión competitiva y social.

Quizá la diferencia entre los partidos de baloncesto masculinos y femeninos no sea tanta como la que sí se aprecia en el fútbol de ellos y ellas. Pero esta tarde, en los aledaños de Miribilla ha reinado un ambiente escolar. De críos como los que, cuando el Athletic jugó contra el Levante, improvisaron con sus jerséis unas porterías en la explanada de San Mamés y se pusieron a jugar al balón, como en el colegio. Ellos y ellas juntos, y por igual. Como esta tarde en el Bilbao Arena, como el Lointek y el RETAbet.