Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Una embolia pulmonar estuvo a punto de apartarla del karate de competición. Tomó entonces la opción de derivar hacia la modalidad de katas dentro del kyokushinkai para superarse como deportista. Ana Santiso se ha convertido, con 21 años, en la nueva campeona de Europa en ... categoría senior de la modalidad. Un título que dedica a su madre, fallecida hace cuatro años tras una grave enfermedad.
- ¿Nos explica qué son las katas?
- Son formas, las que se ejecutan en un tatami cuando compites en karate pero sin rival y sin contacto. Parece sencillo, pero es exigente. Compites contra ti misma. Lo que se valora es la fuerza, el nivel atlético y, sobre todo, la corrección técnica.
- ¿Viene de lograr el título europeo en Lisboa el pasado noviembre. ¿Cómo lo recuerda?
- Empecé a preparar este Europeo con malas sensaciones porque venía de estar parada muchos meses. Tuve emociones encontradas. me costó mucho recuperar el tono físico y eso me hizo perder la motivación. Pero con disciplina y gente que te apoya en tu entorno, todo lo puedes superar. Fui a Lisboa con el objetivo de competir a buen nivel porque los médicos me dijeron que no volvería a hacerlo debido a un problema pulmonar. Mi entrenadora, Naroa Lezkano, estaba convencida de que podía subir al podio. Superé todos los obstáculos y, cuando logré el oro, no pude contener las lágrimas de tanta emoción y lo celebré con todos los compañeros.
- ¿Es más difícil competir ante un rival que contra una misma?
- Te diría que sí. Sales sola al tatami y tienes que saber controlar los nervios y la presión. En mi caso, cuando salgo sé que tengo que plasmar todas las horas de entrenamiento que hay detrás. Es complicado porque en el minuto y medio o dos que dura un kata te juegas el trabajo de muchos meses. Para mí, el apoyo principal es mi entrenadora.
- En esos dos minutos que dura el kata, ¿qué elementos se deben realizar?
- Los katas ya están preestablecidos. A los competidores nos dan una lista y tenemos que preparar dos, uno para la fase general donde nos puntúan con una nota del 1 al 10. Las cuatro mejores notas pasan a la ronda final, donde hay que realizar otro kata de mayor dificultad técnica. Hay cinco árbitros y cada uno da su nota. La más alta y la más baja se eliminan y se hace una media con las otras tres.
- ¿Por qué es tan especial el título continental que ha logrado en Lisboa?
- Es mi mayor logro deportivo. Estuve mucho tiempo parada debido a una embolia pulmonar. En mi primer Europeo de 2018 en el que conseguí el bronce, cuando volví habían ingresado a mi madre en el hospital y una semana más tarde falleció. Ahí le prometí que iba a conseguir ganar un campeonato de Europa y lo he hecho. Se lo dedico a ella.
- ¿El karate siempre ha sido su deporte?
- Venía de hacer tenis y gimnasia rítmica. Tuve muchas lesiones en los tobillos, que sigo arrastrando, y una amiga del colegio me animó a que probara con el karate. Fue con 11 años y continué, porque me fue enganchando. Los primeros campeonatos se me dieron bien e hice muy buenos amigos. En este deporte se crea una familia. En 2018, antes de un campeonato de España, el seleccionador me dijo que si conseguía podio tenía posibilidades de ir a un europeo. Era mi sueño y lo conseguí. Después también pude competir en mi primer Mundial lo que me dio esa oportunidad de empezar a tener un palmarés internacional. Después vino el covid y, en mi caso, sufrí la embolia pulmonar que me obligó a parar durante un año y medio porque los médicos me prohibieron tanto competir como hacer ningún tipo de actividad física.
- ¿Cuál fue el origen de esa embolia pulmonar?
- Fue por las pastillas anticonceptivas. Me produjeron esa reacción. Me dijeron que es un caso entre un millón y me tocó a mí. Generalmente se suele dar entre personas no deportistas o fumadoras. En mi caso, he sido la excepción porque soy deportista de élite. Después de un campeonato de España me empecé a encontrar mal y, tras ingresar en el hospital, vieron que tenía muchos coágulos en los pulmones. Estuve en la UCI y en situación de peligro. Superadas las horas críticas, me dijeron que mi vida cambiaría y que me quitara de la cabeza lo de competir.
- ¿Cómo logró volver a la competición?
- Me empeñé. Los entrenamientos fueron mi rehabilitación. Como no puedo hacer karate de contacto, decidí volcarme en las katas que ya venía haciendo. Eso me hizo centrarme. No me he recuperado al 100%, pero espero conseguirlo en un futuro.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.