«Me engancharon los valores del rugby»

- ¿Ha asimilado ya que es subcampeona europea?

- No te creas. Cuesta todavía aunque ya han pasado unas semanas. Ha sido bastante inesperado conseguir la medalla de plata porque íbamos con ilusión pero no creíamos que podríamos ganar a equipos como Inglaterra o Irlanda, que eran favoritos. Sólo nos superó Francia. El nivel del rugby femenino en España está subiendo porque cada vez hay más chicas que lo practican y eso repercute en la selección.

- ¿Cómo fue la preparación hasta llegar a Praga?

- Hicimos dos concentraciones previas de seis días en el Centro de Alto Rendimiento de Barcelona. Al principio fuimos bastantes convocadas hasta que finalmente se cerró la lista definitiva. Cuando me vi en ella, no me lo podía creer. Fue una sorpresa y una alegría a la vez. Es verdad que había trabajado y entrenado mucho pero había muchas compañeras con mucho nivel. Imagínate, se lo conté a mis padres, en el Gaztedi estaban supercontentos.

- Empieza a entrar en la dinámica de la selección. ¿Se ve como Anne Fernández de Corres, pilar de la absoluta?

- Para mí Anne es una referente. Una vitoriana formada en el Gaztedi que ha logrado varios campeonatos de Europa y que es una pieza tan importante en la selección.

- ¿Cómo se inicia en el rugby?

- En un principio hacía hockey patines en el Aurrera de Vitoria. Pero a través de mi padre y con Iñigo Ezkerra como referente, nos animamos un día a probar y desde aquel momento no pude dejarlo. Me enganchó tanto que abandoné el hockey y me centré en el rugby sin pensarlo. Son dos deportes totalmente opuestos. Del rugby me atrajo ese sentimiento tan arraigado de equipo, el contacto. Y sobre todo, que dentro del propio deporte practicas muchas dinámicas, desde correr, hasta tener balón, compartirlo con tus compañeras o placar. Y eso que al principio me costó pillar todas las reglas porque son muchas y van cambiando.

- Forma parte del equipo senior del Gaztedi. ¿Esperaba la gran temporada que han cuajado?

- Ha sido increíble. Este año hemos conseguido el título de liga y jugamos la fase de ascenso aunque perdimos. Nos tocó uno de los rivales más complicados, el Barcelona, que está a otro nivel. Fueron muy superiores pero la experiencia para nosotras ha sido increíble. Es verdad que es el premio a un trabajo que se venía haciendo desde años y por fin ha dado sus frutos. Ha sido una pasada. No te lo puedo describir con palabras.

- Afronta una nueva temporada llena de cambios. ¿Es una despedida del Gaztedi?

- Sí, por razones académicas. Este año comienzo los estudios universitarios. Voy a hacer Publicidad y Relaciones Públicas en Leioa y eso significa que me quedó allí. Así que me incorporaré al Getxo de División de Honor B para poder continuar con el rugby. Es un reto ya que la categoría es superior y será más exigente. Pero era la mejor decisión para poder hacer compatibles mis estudios con los entrenamientos.

- ¿Estar en División de Honor B supondrá un buen escaparate para seguir contando para la selección?

- Yo ya he cumplido mi etapa como sub-18, así que lo que venga tendrá que ser ya en la absoluta. Está difícil, pero es cierto que estamos muchas chicas jóvenes. Ojalá pueda abrirme un hueco y debutar con la selección. Sería un sueño.

- ¿Baraja la opción de dedicarse al rugby si le llamaran para estar en un centro de alto rendimiento?

- Es algo que no me he planteado porque no ha llegado esa oportunidad. Pero es verdad que después de vivir las experiencias de las concentraciones donde respiras rugby las 24 horas del día, me gustaría porque sería una experiencia única. Ya veremos. Este año me centro en mi primer curso universitario y en mi nuevo club. Después, que venga lo que tenga que venir. Iremos viendio.

- Juega de medio melé. ¿Qué tiene de especial esta demarcación?

- Esta temporada he estado en varios puestos pero juego de '9', de medio melé. Tienes que mandar al equipo y sacar el balón. Cada jugada y cada acción empieza en este punto. Por eso es un puesto con mucha responsabilidad.