«Me retiro del baloncesto, mi cuerpo ha dicho basta». Así se despide de las canchas Tania Pérez (Santa Colomá de Gramenet, Barcelona, 1991), que ha dicho adiós con un emotivo vídeo colgado en sus redes sociales. «Los deportistas sabemos que las lesiones forman parte ... del camino y la cabeza jugaba un papel fundamental para poder sobrellevarlas. No es una decisión fácil, al contrario, duele y mucho, pero sé que cuando mire atrás y vea todo lo que me ha dado el baloncesto me va a salir una sonrisa, porque creces como persona, como jugadora, te aporta infinidad de experiencias y nunca voy a poder agradecer al baloncesto todo lo que me ha dado», explicaba con las lágrimas a flor de piel la escolta catalana, de 29 años.
Publicidad
Prematuro final a una brillante carrera que empezó en Gramenet y acaba en el Araski, donde Tania Pérez ha jugado la última temporada y media. En medio, Sarria, Cadí La Seu, la selección, Liga argentina (Berazategui), Liga polaca (Sleza Wroclaw), Mann Filter y 43 partidos oficiales con la camiseta verde. 9,1 puntos por encuentro la pasada campaña. 2,7 en ésta, muy condicionada ya por las lesiones que no le han dado tregua durante esa trayectoria y ahora le obligan a abandonar las canchas.
En 2009 llegó la primera rotura del ligamento cruzado anterior, en la izquierda; en 2011, en la derecha. Cuando parecía haber pasado el calvario, en 2018 se rompía el cuerno externo de un menisco y, como remate, condromalacia en ambas rodillas -desgaste del cartílago-. Una lesión crónica con la que ha aprendido a convivir, pero que le impide ser ella misma dentro de la cancha. Le impide ser esa jugadora pasional, entregada y comprometida que el pasado curso, su primero en Vitoria, se mimetizó a la perfección con la filosofía del Araski.
De familia emigrante -padre de Barbastro (Huesca) y madre sevillana-, sus orígenes humildes forjaron una personalidad fuerte que le sirvió para afrontar esos duros momentos. Para brillar, pese a todo, dentro y fuera del rectángulo de juego. Quedan los puntos, las asistencias, los rebotes. Y el baile del 'limpiaparabrisas', que, con Tania como gran protagonista, trascendió hasta convertirse en un símbolo tras cada partido en Mendizorroza.
Publicidad
Queda la admiración de compañeras y rivales, que ayer se volcaron en su adiós. Mensajes de despedida del Promete, el Casablanca, el Perfumerías, el IDK, la Federación Vasca... Innumerables. «Gracias por todo», le decía Laura Quevedo. «Siempre en mi equipo», subrayaba Natalia Van den Adel. «Lo has dado todo y más, has sido un ejemplo de lucha y no te has rendido. Pasión, corazón, entrega, compromiso... Así eres tú y así te hemos disfrutado», recordaba María Asurmendi. Es un «hasta siempre», como decía la propia Tania.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.