Roberto Íñiguez de Heredia dejó de ser entrenador del Perfumerías Avenida en una decisión que retrata su carácter. Dos ligas, una Copa de la Reina, dos Supercopas y dos presencias en la Final Four son su cosecha con el club salmantino. Gustará o no, pero ... el vitoriano, a sus 54 años, no se calla y tampoco se corta a la hora de tomar decisiones. «Me voy ahora porque creo que el equipo está en el punto de disputar todo. Si no lo hubiese visto, no lo hubiera dejado», aseguró acompañado del presidente del Perfumerías, Jorge Recio.
Publicidad
Su llegada a Perfumerías Avenida en plena pandemia supuso una ilusión para todas las partes. El vitoriano aterrizaba en el club español más laureado. Su empeño en mejorar y hacer crecer la entidad le comenzaron a desgastar en pequeñas batallas personales. En lo deportivo, el equipo jugó el mejor baloncesto, siempre con el aval de unas jugadoras que han estado con el técnico vitoriano en su gran mayoría. Como muestra, los mensajes de cariño de referentes del vestuario azulón, Maite Cazorla, Leonor Rodríguez, Andrea Vilaró y por supuesto la capitana Silvia Domínguez, a la que siempre le ha unido una relación personal especial.
Íñiguez de Heredia quiso hacer del Perfumerías Avenida un club más grande. Y no solo con títulos sino con métodos y condiciones. El fuego empezó a arder más en el comienzo de esta temporada, con una relación insostenible con el director deportivo, Carlos Méndez, al que no dudó en señalar como culpable de la deficiente planificación y de los fichajes. En noviembre, el vitoriano empezó a airear su malestar de manera pública. Dos días después, tanto Recio como Méndez respondían en una rueda de prensa a su técnico exigiéndole que se dedicara exclusivamente a entrenar.
Al final, el problema trató de cerrarse con la dimisión de Méndez. Llegaron nuevas jugadoras, más del gusto del gasteiztarra y con Recio como único ejecutor. Michaela Onyenwere y Bridget Carleton podrían equilibrar una plantilla inferior a la de la temporada pasada a pesar de los fichajes estrella iniciales de las WNBA Moriah Jefferson o Erika McCall.
Publicidad
Sin embargo y cuando las aguas parecían discurrir más tranquilas, todo en apariencia, un altercado la semana pasada en Zaragoza, con una agresión a su hermano en la grada, disparó aún más los nervios nada templados del técnico alavés.
Todo tiene su fin y para Roberto Iñiguez de Heredia, cosechador de éxitos allá por donde va, su trayectoria por tierras salmantinas ha concluido. El Cukurova turco será su próximo destino con la misión de seguir sumando títulos, algo que está en su propio ADN de entrenador ambicioso y perfeccionista.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.