Un verano que promete

El verano apunta bien para la música en vivo, para los conciertos de los grupos en gira y los grandes festivales, a pesar de la inflación y la incertidumbre derivada de la guerra de Ucrania. Piénsese que tras dos años muy oscuros, incluso con veranos ... sin apenas festivales, la curva ascendente del negocio musical empieza a generar optimismo en toda su cadena de valor, donde se integran músicos, técnicos, discográficas, promotores, patrocinadores, ayuntamientos y comunidades autónomas. Porque todos estos conciertos y festivales de verano son una mezcla bien elaborada de difusión y política cultural, de promoción municipal y territorial, de negocio para la industria musical y hasta de activo fundamental para la oferta turística y local. Los datos al respecto son bien elocuentes: su impacto estimado en España alcanza los 5.600 millones de euros, el presupuesto medio de un festival se encuentra en torno a los 639.000 euros, suelen crear de media 130 puestos directos y 230 indirectos; y los diez principales generan un negocio superior a los 400 millones de euros. Todo esto explica, naturalmente, el surgimiento vertiginoso de festivales por toda la geografía y el creciente deseo político de lograr imágenes de marca que asocien los festivales con ciudades o regiones, algo que solo se alcanza cuando se planifica con eficiencia, se combina con inteligencia el esfuerzo público con el privado y la cultura popular con la elitista; y cuando se consigue una masa crítica adecuada. Este año la renacida apuesta por los festivales está en fuerte disputa y competencia, tras dos años de desierto y penuria, algo que podría anticipar una cierta criba entre los eventos de menor sustancia. Afortunadamente el esperado tirón turístico y el crecimiento en un 90% de la demanda de viajes a festivales de música, con España a la cabeza, hacen prever un resultado mucho más que positivo. El verano apunta bien o muy bien para los festivales y conciertos, insisto, pero con tanta oferta y con tan oscuros nubarrones económicos en el horizonte, lo que toca es especializarse y destacarse.