La última obra de Fernando Marías

El reto de llevar a escena «una novela infinita en sus 160 páginas» surgió de forma natural. Tras hacer juntos 'Mariana Pineda', GG Producción Escénica y Teatro del Nómada buscaban otro proyecto. «Nos juntamos con títulos de obras, películas y novelas y al ver 'Los santos inocentes' supimos que era lo que queríamos hacer», recuerda Hernández-Simón. Necesitaban a alguien «con dominio de la palabra» y acudieron a Fernando Marías. Trabajaron dos años en la adaptación del texto, que se publicará en Austral.

El escritor bilbaíno explicó en el dosier de la obra su manera de acercarse a «esta novela política en la que Delibes se compromete». Desmontó párrafo a párrafo su «asombrosa» estructura -solo hay seis puntos, uno al final de cada capítulo- «para armarla de otra forma que viniera a contar lo mismo». Los «rastros de héroe anómalo» que hay en Azarías, la «lucidez» de su hermana Régula, «la maldad impune» del señorito Iván y la «resignación férrea» de Paco, el Bajo, «acaso el personaje que más nos concierne» .

«Fernando tenía una cultura y una mirada sobre el mundo, la literatura y el arte verdaderamente asombrosa», dice el director. Ambos estuvieron de acuerdo en la «plena vigencia» de la novela, ambientada a finales de los 60 y publicada en 1981. «Ya no estamos en ese lugar tan extremo, pero tenemos que reflexionar sobre la desigualdad y sobre el papel de la educación pública y universal en nuestra sociedad, un cimiento fundamental para la libertad individual y colectiva. Delibes no habla del pasado, hace una advertencia sobre el futuro».

También tenían que alejarse de la película de Mario Camus que tenemos grabada en la memoria. «El reto era conseguir algo que fuera nuestro, no la copia de nada, y que el espectador olvide los referentes que tiene en la cabeza. Era lo más difícil y de lo que más orgullosos estamos, porque pensamos que lo hemos conseguido», afirma Hernández-Simón. Se apoyan en «el compromiso» de un elenco formado por Javier Gutiérrez, Luis Bermejo, Pepa Pedroche, Jacobo Dicenta, Fernando Huesca, Yune Nogueiras, Marta Gómez, José Fernández y Raquel Varela. También en la fuerza del lenguaje de Delibes y en el simbolismo de recursos escénicos como los pájaros blancos «inmovilizados» sobre los personajes. «La libertad es un pájaro que vuela y en este mundo todos están presos, esclavos de los caprichos del señorito Iván». El estreno es un homenaje «a dos personas muy importantes» para este proyecto, Fernando Marías y el actor y productor Óscar Zafra, fallecido en junio.