Vida sin Norman

Netflix acaba de estrenar la tercera temporada de 'El método Kominsky', esa estupenda serie sobre dos viejos amigos que viven en Los Ángeles protagonizada por Michael Douglas y Alan Arkin. Solo que Arkin, que tiene 87 años, firmó por dos temporadas y ya no aparece. Su agrio y sarcástico personaje, un poderoso agente cinematográfico recién jubilado, era el alma de 'El método Kominsky', un entrañable gruñón con réplicas demoledoras. Para sustituirlo han buscado a Kathleen Turner, que encarna a la exmujer del profesor de interpretación al que da vida Michael Douglas. El juego referencial funciona (los dos actores reinaron en los 80, cuando eran bellos y jóvenes con 'Tras el corazón verde' y 'La joya del Nilo'), pero se echa de menos a Arkin. Y mucho.

Los guionistas no se han cortado un pelo: la primera secuencia de la nueva entrega es el funeral de Norman, cuya imagen se recupera en un par de 'flashbacks'. En cuanto a su espíritu, el finado sigue tocando las pelotas desde el más allá al nombrar albacea en su testamento a su colega: una manera de recordarles su presencia a su hija extoxicómana y a un insoportable nieto cienciólogo.