Nuevo conato de abandono en 'Supervivientes': «Esto es horrible»

Daba la impresión de ser una de las concursantes más fuertes, pero no. Gema Aldón sorprendió a la audiencia de 'Supervivientes' con una decisión totalmente inesperada. La joven cogió el petate y se puso frente a la cámara para avisar a Ion Aramendi de que había decidido abandonar el formato. «Llevo tres días sufriendo algún tipo de dolencia en el codo y es insoportable. No me ha dolido tanto parir. Hoy me han puesto una infiltración. Mi concurso ya llego a su fin. No puedo más ni física ni psicológicamente», resolvió tajante. Lo que no esperaba es la reprimenda seria que se llevó del presentador. «Ayer el equipo médico trató de ponerte un tratamiento para tus dolencias sin éxito porque tú lo rechazaste de manera radical. Hoy, sin embargo, has aceptado el tratamiento. Y evidentemente tardará en hacer efecto. Los doctores nos dicen que puedes continuar y que ellos te tendrán en observación para ver cómo evolucionas. Dicho esto, no hay razones que aconsejen tú evacuación. Ahora, si tú quieres abandonar, estás en tu derecho, pero haciendo frente a todas las consecuencias de tu abandono», zanjó.

El rostro de Gema cambió. Daba la impresión de que la hija de Ana María Aldón esperaba otra respuesta y no contaba con tener que abonar la multa que ponen a quienes dejan sin razón el concurso. «Estoy súper agradecida al equipo médico, pero le tengo un pánico horrible a las agujas. Me aconsejan que espere, pero no puedo pasar un día más tirada en esa esterilla. Nunca pensé que me podía pasar esto. Sé que tengo que hacer frente a muchas cosas, pero me voy para España», insistió. Y remató: «Esto es horrible».

Visto lo visto, solo quedaba la carta de implicar a un ser querido para que tratara de convencer a Gema, y ahí estaba su madre. «Lo primero, quiero pedirte perdón por todas las veces que no confié en ti, que me has dejado a la altura del betún. Te dejé el listón muy alto y lo estás superando. Sigue porque tú puedes», animaba la diseñadora. «No puedo más», se lamentaba la aludida llorando. La ex de Ortega Cano persistió en su discurso. «Están bajo control todas tus preocupaciones. Abandonar no es una opción porque eso te va a frustrar tus sueños. Y tienes el apoyo de toda España. Este es tu tren, sigue en él y no te bajes. Sigue, metro y medio mío, que te quiero con locura», arengó Ana María. «Vale, mamá, me quedo aquí», asumió Gema. Asunto resuelto, de momento.

Por otro lado, la audiencia decidió expulsar definitivamente a Sergio Garrido. El paparazzi se enfrentaba a Jaime Nava y Artùr Dainese. El trío lleva unos días desterrados en la Playa de los Olvidados y se jugaban la permanencia en el 'reality', aunque se intuía el resultado porque el fotógrafo ya había manifestado sus deseos de marcharse. «Me he reído, he llorado, he conocido gente maravillosa. Me voy con la cabeza muy alta», decía Sergio antes de despedirse. Y la que está desesperada es Adara Molinero. A la modelo le redujeron su ración de arroz y estalló contra Arelys Ramos, que era la encargada del reparto. «Me adapto a todo, pero las raciones no se tocan. No estoy bien, lo estoy pasando mal. No me rebajes los treinta gramos de arroz porque te da la gana», bramaba Adara entre lágrimas. Y como su adversaria pasó de ella, estalló. «Llevas tres días tocándome los cojones con la ración y al final me sacas de mis casillas. Que vas de Virgen María y tienes el demonio dentro, ¡payasa!», insultó. «Es para echarle de comer aparte», opinaba Arelys sin prestarle demasiada atención. «Me siento ninguneada y asfixiada», zanjó Adara llorando desconsolada.

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