El pico de Ramón García con la cómica Carolina Iglesias: «Fuiste mi primer amor»

Iglesias se declaró una auténtica fan del 'Grand Prix'. La reconocida humorista acudió con una carta que escribió con solo 5 años y en la que se dirigía a una de las azafatas que acompañaban a García en el programa. «A mí me gustan las mujeres pero tardé mucho en salir del armario, aunque en esta carta ya se podía intuir», bromeó. Antes del beso entre ambos, la presentadora de 'Estirando el chicle' le dijo que lo prefería «sin lengua porque he comido ajo», por lo que Ramón le propuso «un piquito».

'Ramontxu' confesó varias anécdotas del programa que aglutinó frente a la pantalla a todas las generaciones. «Es verdad que había muchos golpes, porque era un concurso donde las pruebas físicas eran de contacto», reconoció. Incluso «se lesionaban hasta los invitados». Y él también era un poco bruto. «Los primeros guantazos... yo me los di muchas veces. Probaba muchas cosas». Conectó, sin duda, con el público: «esa es la sencillez de su éxito. Por eso funcionaba, porque era muy fácil de entender. Sumabas puntos de uno en uno, con lo cual no tenías que ser matemático tampoco y lo que veías era muy fácil».

El frenesí era tal que hasta «los chicos que cambiaban el decorado se rompieron bastantes cosas. Siempre teníamos una ambulancia de guardia y se los llevaban al hospital de turno y, cuando volvían, les firmaba la escayola. Era como la medalla de las Olimpiadas». En cierta parte, el 'Grand Prix' era como un partido de fútbol o baloncesto. «Era un programa grabado, pero lo grabábamos en tiempo real y no podíamos parar la realización de una prueba. Intentábamos buscar la realización deportiva». En otra declaración sin pelos en la lengua, García lanzó que «yo decía: 'Si alguien cae, sacáis el cadáver arrastrando y luego ya veremos'. Y yo seguía, no podía parar».