Joaquín Sánchez sigue su periplo en busca de un oficio y esta vez escogió el de actor. Para aprender se acercó a Antonio Resines, con el que mantuvo una charla plagada de anécdotas. El protagonista de 'Los Serrano' desveló que hizo 36 películas en ... sus diez primeros años dedicado a la interpretación. «Me decían: ¿Vas a dedicarte a esto? Y yo contestaba que iba a ver si aprovecho la rachilla», recordaba.
Publicidad
Sus inicios fueron exitosos en cuanto al trabajo, aunque su familia no estaba muy conforme con su decisión laboral. «A mí padre no le gustaba nada. Era abogado. Yo empecé Derecho, pero no lo acabe», precisaba.
«Almodóvar manda mucho porque además de guionista y director, es el productor de sus películas», explicaba Resines a un Joaquín embelesado. Pero no todo es éxito. «El fracaso es complicado. Hay que estar preparado. Eres el tío más famoso de España y, de repente, en uno o dos años, desapareces y ya no te llama ni el tato. Aparte de que económicamente es jodido. En esta profesión más del ochenta por ciento no gana más de seis mil euros al año», descubría. Y desterró otro mito: «No se liga mucho, todo eso son tópicos».
Paz Padilla, Santiago Segura y Antonio Molero se sumaron a la conversación salpicando chascarrillos. «Yo tengo probablemente una de las peores críticas de España. En 'Ópera prima', el primer largo que hicimos, publicaron en un periódico: «En esta película lamentable salen dos tipos: el protagonista, Óscar Ladoire, y el segundo, Antonio Resines. Son probablemente los peores actores que han salido en España desde que acabó la Guerra Civil», rememoraba Resines provocando las carcajadas de sus colegas. Aunque la anécdota más chocante la desveló Paz Padilla. «Me detuvieron por etarra», arrancaba la humorista. Y detallaba: «Iba en un tren con mi mánager y dos amigos camino al Carnaval de Cádiz. Pararon el tren antes de llegar a Sevilla y vemos a un montón de militares armados hasta los dientes. Y yo, como siempre, empecé a bromear. Pero vemos que entran en nuestro vagón, vienen hacia nosotros y nos apuntan con las armas. Ahí ya dejé el cachondeo. Nos dijeron que nos levantáramos y nos pidieron la documentación sin dejar de apuntarnos. Se lo enseñaron al sargento. Y el hombre empezó a decir muy cabreado que yo era Paz Padilla. 'Nos habían dicho que venían cuatro etarras ¡y es Paz Padilla! ¡Venga hombre!'. Llevamos todo el día cagados. Hala, vámonos de aquí', exclamaba el sargento. Se fueron, y para pasar el susto decidimos emborracharnos», relataba la actriz entre risas.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.