Rafa se lleva el bote de 'Pasapalabra' de un tirón

Dejó al personal con la boca abierta. No solo por lograr los 2.272.000 euros, el bote más alto de la historia de Pasapalabra, sino también por hacerlo de un tirón. Rafa Castaño comenzaba el rosco tranquilo, como el de una tarde más, pero a medida que iba acertando preguntas la tensión se iba acumulando. Contaba con 179 segundos y le sobraron la mitad. «Escarabajo que ataca los trigales especialmente cuando los granos son tiernos», era la última pregunta, la de la letra 'Z'. Pausa emocionante de Roberto Leal y grito ensordecedor que indicaba que había triunfado.

Rafa se echaba las manos a la cabeza, aún no era consciente de su hazaña. Incrédulo, le costaba reaccionar ante el confeti y los abrazos de los invitados al programa: Bárbara Rey, Diego Cantero, Irene Villa y Eduardo Navarrete. Orestes sonreía, a pesar de que la gesta de su adversario no le había dado oportunidad ni siquiera a responder una cuestión.

«¡Es brutal!», exclamaba ante la proeza de su amigo. El sevillano seguía abrumado. «Te juro que no lo he asimilado. Pienso mucho en Orestes porque se lo merece tanto como yo», declaraba generoso. Y continuaba refiriéndose a Orestes. «Estoy muy contento, pero a una parte de mí le da pena. Lo primero que me ha salido es abrazarle porque no solo ha sido un rival, ha sido un compañero. Siempre diré que ha sido el mejor tío que ha pasado por aquí», manifestaba emocionado.

Orestes también tenía palabras cariñosas para el ganador de 'Pasapalabra'. «Eres la persona que más ha trabajado esto y te mereces hasta el último euro», elogiaba. Y con respecto a su marcha del concurso, ésta sin millones, también tenía discurso. «No tengáis pena por mí, yo tengo un bote acumulado y unos cuantos años resueltos con él. Espero poder volver dentro de cuatro o cinco años», deseaba.

Leal no podía contener la emoción al despedir a dos de los participantes más especiales de la historia del programa. Y aquello se multiplicó cuando los padres de Rafa entraron en escena. Una llamada increíble. «Papá, lo primero decirte que llegaré en el Ave a las nueve, un poco más tarde. Y luego, que acabo de ganar 2.272.000 euros», lanzaba el andaluz desatando el entusiasmo de su familia. «Estas llamadas son las que interesan», bromeaba el progenitor satisfecho. «Estamos orgullosísimos de él», exclamaba a continuación.

Segundos después era el hermano del vencedor el que aparecía en conexión audiovisual. «Me he tenido que salir de la carretera. Estoy aquí, al lado de un olivar, y creo que hay que darle la enhorabuena a alguien», afirmaba con simpatía. Rafa desvelaba entonces que el primer día que acudió a grabar 'Pasapalabra' era el cumpleaños de su sobrino, a quien prometió comprarle una equipación completa del Betis si ganaba el rosco. «Le puedes comprar media plantilla», aseguraba Leal con guasa.

«Horas le ha echado muchísimas», indicaba el padre del triunfador consciente de que su hijo dedicaba hasta catorce horas diarias a formarse. «Estoy muy satisfecho, he renunciado a cosas por estar aquí», apuntaba Rafa ya consciente de que había alcanzado una meta gloriosa. «No sabéis lo que os voy a echar de menos a los dos», declaraba sincero Roberto Leal abrazando a Rafa y a Orestes. El ganador, por razones obvias, y el burgalés porque las reglas del concurso dicen que cuando se entrega un rosco, ambos concursantes abandonan el formato. «A partir de mañana comienza un nuevo ciclo. Vienen nuevos concursantes y el que entre, ya te digo yo que es bueno. Vamos a conocer nuevos perfiles», informaba el comunicador.

• Temas
• Antena 3
• España
• Pasapalabra
• televisión