Isa Pantoja evita mojarse en 'La casa fuerte'

Si hay un personaje especializado en montar pollos en televisión, ésa es Sonia Monroy. De hecho, es su gran talento. Por mucho que se empeñe en presumir de trabajar en Hollywood, su don es que te organiza una escandalera a grito pelado cuando menos te lo esperas. Y eso vende. Y más en un formato que está flojeando y necesita imperativamente conflictos, cuanto más sonoros, mejor. La 'artista' ha entrado en 'La casa fuerte' con su chico, Juan Diego, un joven aspirante a estrella que, de momento, parece su marioneta. El chico entró modosito, pero parece que quiere cortar los cables que le sustentan. Rebeca le llamó 'nene' de forma cariñosa y Sonia estalló: «Yo te llamo pollito porque eres mi pollito, pero que no te lo diga nadie más». No fue para tanto, algún que otro grito más y 'pollo' solucionado. Y luego están Sandra y Samira, que se llevan a matar y en la gala volvieron a echarse en cara los supuestos 'cuernos' que una le ha puesto a la otra. Tampoco ardió Troya por esto. Además Samira tiene otra rival: Cristini. Las muchachas no se tragan y la brasileña se echó a llorar porque decía que la otra se había metido con ella por ser transexual. Unas lagrimillas y pelillos a la mar.

Satélites comentados, vayamos al lío principal. Cuando no es Isa Pantoja, es su prometido. Asraf, que aparenta ser tan sensible como una chincheta, cargó duramente contra su suegra comparándola como madre con Maite Galdeano, la progenitora de Sofía Suescun. ¡No le faltaba más a Isabel Pantoja! Tras posicionarse a favor de Kiko Rivera en el conflicto que mantienen la tonadillera y su hijo, Asraf, que a veces parece que tiene menos luces que un barco de contrabando, acabó pidiendo perdón a la folclórica y emocionándose. Más llantos. «Esto es un concurso, no el 'Sonrisas y lágrimas' de Isabel Pantoja», reprochó Chabelita. Nada más lejos de la realidad. Una vez más el peso de la gala recaía en el clan. Jorge Javier Vázquez le contó todo el jaleo que se ha formado fuera, las duras palabras de Kiko hacía su madre y hasta que van a hacer un programa especial sobre Cantora. «No me voy a posicionar con ninguno de los dos», repetía la concursante. Y el presentador seguía metiendo el dedo en la llaga. Y la chica, evitando involucrarse. «Yo ya he estado en esa situación y ellos no dieron la cara por mí, así que yo tampoco la voy a dar por nadie», zanjó Isa. Y tras el misil, todos a la cama.