Nella define la situación en la que quedan los Piche: «Va a ser una matanza»

Una vez en el estudio, la joven pasaba al ataque. «Por un lado, yo era el voto más fácil y, por otro, Jokin ha dicho infinidad de veces que iba a salvar su culo. Y pensó: 'A esta me la quito», argumentaba para explicar por qué le condenaron los azules.

Asegura que se siente más Piche que Puma, pero tiene palos para todos. Nella realizó un certero análisis sobre la situación en la que queda el equipo azul. «Cada uno va a salvar su culo. Está el grupo de fuertes: Jokin, Andrea, Lobo, Azu… y luego están Annie y Luisito por el otro lado. Annie es la que rula la cabeza y está maquinando y Luisito se deja llevar por la cabeza que esté a su lado, y en este caso es Annie. Va a hacer todo lo que le diga ella», consideraba la peruana. Y finalizaba su estudio con una predicción. «Eso va a ser una matanza», avisaba. Y para quienes le criticaban porque decía sentirse Piche y luego los diseccionaba, también tenía respuesta. «Una cosa es que yo esté a gusto con el grupo y otra que yo esté ciega y no vea lo que hay», comentaba. 

Nella inició su aventura vestida de rojo y para sus ex compañeros también tenía reproches, empezando por el que fue su capitán, David Seco. «Cuando llegó, para mí fue una tranquilidad porque estábamos como pollo sin cabeza. Pero no era el Seco que veía yo en la tele. Era como más pasota», apuntaba. El veterano líder se revolvió, pero poco porque ella le pidió disculpas rápidamente, puntualizando que se refería a que no había elegido a un expulsado entre los tres Pumas señalados por la organización en su día: Izan, Xabi y Mejuto. Lo curioso fue que, en la discusión, se desveló que los Puma han desactivado el grupo de WhatsApp que tenían. Seco tiró de sorna. «Bueno, hay otro que se llama Ni maíz ni ostias», ironizaba. 

Siguiendo con la disección del equipo rojo, Nella definía a los Puma con una palabra: «Falsedad». Aunque no todos le caían mal, alguno se salvaba. Igor había declarado días antes que había tenido algo con la peruana. «Hubo cuatro besos», dejaba caer el de Altsasu. La aludida echaba balones fuera. «Yo no he venido aquí a buscar pareja, he venido a competir», arrancaba. Pero pronto recapacitó y recogió cable. «Es verdad, hubo cuatro besos. Ni Igor ni yo teníamos pareja, así que era lícito. Creo que Igor, para cualquier chica es un partidazo», brindaba al chico. «No pudo ser con ella», lamentaba Igor. Y Nella resolvía el asunto. «Está saliendo con otra, que me lo ha dicho hoy», despachaba.