La nueva expulsada en 'Masterchef Celebrity' cumple su deseo con uno de los jueces

La cantante Ruth Lorenzo tuvo que colgar su delantal tras un plato «flojo en cuanto al sabor», pero no se marchó sin antes consumar un deseo con uno de los jueces

Martes, 27 de septiembre 2022, 07:22

«No dejes de cantar», avisaba Pepe Rodríguez a Ruth Lorenzo. No era un piropo, más bien un aviso de que las cocinas no son para la artista. Y la observación cuajó al final del programa. Todo comenzaba con una prueba en la que ... los dichos populares tomaban el protagonismo. Ofelia, semifinalista de 'MasterChef 9', se encargó de asignar un refrán a cada aspirante, para que elaboraran un plato libre inspirado en él. Pepe Barroso fue el peor al insistir en cocinar un rabo de toro «que no hay quien se lo coma», advirtió Samantha Vallejo-Nágera. El joven ya había intentado seducir a los jueces con el mismo alimento semanas atrás y está empecinado en ello. «No me voy a ir de aquí sin que os comáis un buen rabo», bromeó provocando risas.

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Patricia Conde fue la mejor posicionada en el reto inicial. Su pollo con falsa salsa teriyaki encandiló al jurado. «Me parece un plató inteligente», ponderó Jordi Cruz. El grandioso teatro de Mérida era el escenario de una prueba histórica. Los equipos prepararon un festín para 150 comensales nobles, con un menú diseñado por el chef Toño Pérez. Patricia compartía fogones con María Escoté, Ruth Lorenzo, Isabelle Junot, Lorena Castell, Nico Abad y Daniela Santiago, mientras Fernando estaba arropado por Manu Baqueiro, María Zurita, Xavier Deltell, Barroso y Norma Duval. Los primeros, vestidos de rojo, tuvieron numerosos fallos durante el trabajo, como por ejemplo olvidar desescamar las truchas antes de cocinarlas o confundir el papel de horno con la pasta filo.

«Estabas pérdida, no sabías por dónde te daba el aire», le dijo Pepe a Conde antes de sentenciar a su equipo. El único que se libró fue Nico Abad, elegido por los jueces como el mejor concursante y el elogio le sirvió para escapar del cocinado final. Escoté, Lorenzo, Junot, Castell, Santiago y su líder portaban los temidos delantales negros y les aguardaba un desafío internacional. Cada uno tenía en su puesto una caja con varias banderas y debían elaborar un plato libre, con elementos típicos de los países que les habían tocado. Cocina fusión con el objetivo de hacer viajar al jurado y a Boris Izaguirre que era el invitado especial de la noche.

Ruth Lorenzo se esmeró a la hora de mezclar la gastronomía española con la oriental, pero el 'wok murciano' que preparó no gustó al jurado. «Se me queda flojo en cuanto al sabor», valoró Pepe antes de expulsarla definitivamente. Eso sí, antes de irse la cantante cumplió su sueño de bailar con Jordi Cruz. A ritmo de pasodoble, la aspirante y el chef danzaron provocando el aplauso de la audiencia y una sonrisa satisfecha de la eliminada. «Estoy muy sorprendida con Jordi, es encantador», declaraba Lorenzo antes de despedirse con una advertencia: «Soy una luchadora que nunca jamás me rindo y voy a seguir cocinando mucho por si acaso vuelvo».

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