Marta Hazas y Álex González desvelan en 'El Hormiguero' lo que más les gustó de Bilbao: «Me he hecho adicta»

Joseba Fiestras

Martes, 11 de junio 2024, 01:13 | Actualizado 15:23h.

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Daniel Écija es el creador de 'Desde el mañana', una serie en la que lo sobrenatural y el misterio se dan la mano. Álex González y Marta Hazas son los protagonistas de la ficción que estrena esta misma semana Disney+. «Es un thriller de ocho capítulos cuya premisa es que, en una mudanza, mi personaje encuentra una piedra y, al tocarla, ve el futuro. Y ve una cosa muy chunga, la muerte de su hija. Y el único que la cree es un policía que ha vivido su misma experiencia», explicaba este lunes la actriz en 'El Hormiguero' que, pese a todo, no cree en fenómenos extraños. «Soy un poco escéptica, pero creo que hay muchas cosas que no manejamos, cosas que hoy se llaman magia, poco a poco irán teniendo una explicación», comentaba.

Hazas no cree en lo sobrenatural, y tiene cierta lógica si echa la vista atrás. La intérprete fue a una vidente cuando era pequeña. «Fui con mi madre y fue fatal, no adivinó nada. Me dijo que tenía muchos hermanos y soy hija única. Que era una persona muy de ciencias, y para nada. Todo lo que decía era lo contrario», rememoraba entre risas. Su compañero, sin embargo, es más creyente. «A mí me gusta. No creo al cien por cien, pero sí a un 99 por cien. No me han dicho cosas muy significativas, pero sí cosas como que voy a viajar mucho y así», afirmaba.

'Desde el mañana' se ha rodado en Bilbao durante cuatro meses y los artistas han tenido tiempo de disfrutar de la ciudad, cada uno a su manera. En los tiempos de descanso, ella quería ir de pintxos y él, hacer deporte. «Somos un tándem perfecto y nos equilibramos a la perfección en eso. Yo hacía un 'afterwork' con unas amigas de la producción. Me tomaba unos vinitos y unos pintxos. Y con Álex me apunté al gimnasio Metropolitan. Y me he hecho adicta al pilates con máquinas y lo he mantenido en Madrid», aseguraba la actriz que, como tiene muchas dioptrías, confundía a su compañero con todo aquel con quien se cruzaba.

«Saludaba a cualquiera que llevara bigote pensando que era yo», desvelaba Alex que, a pesar de que no le hacía mucha gracia lo de dejarse bigote, tuvo que hacerlo por sugerencia del productor de la serie. Él también se dejó llevar por Hazas. «Marta mejoró mi vida social. Bebo muy poco alcohol, pero me sacó por Bilbao. Ella se hizo adicta a pilates y yo, a los pintxos», confesaba. Y lo de comer y beber no fue lo único que les llamó la atención de la capital vizcaína, «Durante los tiempos libres de rodaje, sobre todo cuando ya estábamos acabando la serie, íbamos a un karaoke. Una maquilladora nos metió en ese mundo», contaban a dúo.