Jennifer Lawrence, en 'El Hormiguero': «Fue aterrador, terrible»

«Me encanta este tipo de comedias gamberras, por eso quizá he tardado tanto en dar con alguna realmente graciosa», afirmaba Lawrence que aseguraba ser fan del humor más desvergonzadas. «He visto muchas veces 'Dos tontos muy tontos'. Las comedias físicas siempre me hacen reír, por muchas veces que las vea», sostenía la estrella de Hollywood que no dudaba en confesar lo despistada que es. «Pierdo el móvil todo el rato y como mucho aguanto día y medio sin él. Lo que más me gusta de volar es no tener acceso a internet y que no pueda recibir mensajes ni enviarlos. Pero pierdo unos dos móviles al año», descubría. Sus descuidos son habituales y ha llegado a confundir personas. «Una vez, en una fiesta, estaba con una señora que me estaba hablando y me estaba felicitando. Y no sé por qué, decidí que era Elizabeth Taylor. ¡Y entonces la actriz ya había fallecido! Estaba alucinando. Y entonces, agarré a una amiga mía que pasaba y le dije que estaba hablando con Elizabeth Taylor. Ella me dijo que no era. Y la mujer me vio contar la anécdota en un programa y escribió a mi agente diciéndole que comprendía el error», relataba. 

«Te tengo envidia porque conoces a Meryl Streep», comentaba Motos. Lawrence sonreía. «Lo entiendo porque es la persona más amable y adorable del mundo. Es muy inteligente. Y tengo su número de teléfono y a veces le mando mensajes. Lo que más me preocupaba era conocerla y entré con la intención de no molestarla, pero ella fue encantadora desde el primer momento», evocaba la intérprete que revelaba que sus referentes cinematográficos son Kate Blanchett y Julia Louis-Dreyfuss. 

Lawrence reconocía en la entrevista que durante el rodaje de 'No mires arriba' sufrió lo suyo. «Se me rompió la funda de un diente. Tenía un agujero en la parte de delante de la boca. Y estábamos en pandemia y no podía ir al dentista. Tuve que hacer toda la película así y, luego, en postproduccion, me pusieron el diente digitalmente», desvelaba. 

Lo que más miedo le da a Jennifer Lawrence son los aviones. Y su pavor tiene un por qué. «¿Tuviste un susto en un avión?», preguntaba el presentador. «Fue aterrador. Terrible. Se paró un motor y tuvimos que hacer un aterrizaje de emergencia y se paró el otro motor. Íbamos a morir todos, pero luego no. La verdad es que ahora volar me cuesta, aunque últimamente he mejorado. En ningún momento llegó a relajarme, estoy tensa y con ansiedad. No me relajo hasta que llego a casa. Lo peor es despegar», admitía.