Un tanto dolido, aunque pelín sobreactuado, Gianmarco se encontró con Adara ya de madrugada, después de una gala en la que los reencuentros fueron los grandes protagonistas de la velada. Antes, la concursante se había confesado con sus compañeras desvelándoles que con su actual ... marido se había sentido poco deseada. «Era mi sueño tener una familia, pero no teníamos momentos de cariño –decía la modelo afligida- y me sentía fea. Empecé a ponerme a dieta, a arreglarme mucho solo para gustarle y no había manera». El testimonio de la joven emocionó a sus contrincantes hasta el punto de que Mila Ximénez ya la da por vencedora del programa. «Lo gana ella porque me ha emocionado y la gente está empalizando con ella porque no ha podido ser más mona contando su historia de amor», decía la periodista muy sincera. Y es que Adara seguía con sus declaraciones con lágrimas en los ojos, tratando de justificar sus sentimientos por el italiano. «De repente apareció Gianmarco y me miraba como si yo fuese un regalo…», contaba llorando. «Tú eres un regalo para cualquiera y si alguien te hace sentir que no vales lo suficiente no merece la pena continuar», animaba la colaboradora de 'Sálvame' dándole un abrazo.
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Alba Carrillo también quiso opinar sobre el melodrama: «Hay hombres que buscan una madre para sus hijos y no saben valorar a la mujer. Y eso es muy doloroso», reflexionaba. Ximénez fue más lejos al opinar, ya a solas en el confesionario, que no se fiaba de Hugo Sierra , « a ver si este está pensando en los 50.000 euros del premio», ironizaba. Y la historia de amor a tres bandas puede romperse en breve gracias a que Gianmarco ha vuelto a la casa, aunque solo sea por una noche. En su primer encuentro el muchacho se mostró distante, pese a que su amiga le pedía constantemente un abrazo de verdad. «Es que no sé qué pensar, igual hoy piensas una cosa y mañana otra», explicaba el joven apesadumbrado. Pero las miradas cómplices ya avanzan que la velada será larga y, como dijo Carlos Sobera, «cualquier cosa puede pasar en las próximas horas».
Por lo demás, otro Hugo, Castejón, protagonizó los momentos más tensos de la noche al enfrentarse de nuevo a Mila Ximénez, que no le dio ninguna tregua: «No sé qué hace aquí, no tengo nada que hablar con él. No quiero volver a verlo jamás en mi vida», gritaba la comunicadora. Luego le tocó el turno a Noemí, que cedió un poco, pero tampoco solucionaron sus problemas. Solo Alba cedió un poco y se disculpó por algunas de sus actitudes. Adara, que también chocó con el polémico cantante, acabó a gritos con él, después de que el controvertido ex concursante aludiera a su falsedad. En la próxima gala, además de enterarnos de si ha triunfado o no el amor entre Adara y Gianmarco, una de las cuatro finalistas abandonará Guadalix dejando solo a tres posibles ganadoras de una edición que está machacando los audímetros.
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