Una doble e inesperada expulsión desata el drama en 'Masterchef Celebrity'

Uno de los concursantes más queridos se derrumbó al ser eliminado y Jordi Cruz se saltó el protocolo: «¿Alguien puede darle un abrazo a este tío?»

Martes, 29 de octubre 2024, 07:26

Las lágrimas inundaron el plató de 'Masterchef Celebrity' tras una doble expulsión que desató el drama. Tras una prueba de exteriores que mareó a Inés Hernand, capitana de ambos equipos, tocaba enfrentarse a la prueba eliminatoria. A Inés le tocaba compartir delantal negro con Pitingo, Marina Rivers, Raúl Gómez y José Lamuño. El quinteto debía replicar unos platos del cocinero Paco Morales, con frutos secos como principales protagonistas.

Publicidad

Lidiar con avellanas no fue fácil, sobre todo para dos de los aspirantes. Rivers sacó matrícula de honor en el cocinado. «Tu plato casi podría servirse en el restaurante de Paco Morales», brindaban los jueces ponderando el trabajo de la influencer. Hernand también aprobó con nota. Quedaban las creaciones de Pitingo, Raúl y José, que no acabaron de seducir a los expertos.

Lamuño fue señalado por Pepe Rodríguez. Era la segunda vez que el actor era expulsado esta temporada. Tras regresar en la repesca, el intérprete volvía a caer. «Rico por fuera, pero muy malo por dentro. El sabor es desagradable. Y es un plato aparentemente te sencillo», valoraban los jueces. Todo parecía indicar que la jornada estaba resuelta, pero no. El de El Bohío despidió también a Raúl. «Muchos errores, demasiados», apreciaban antes de decirle adiós al comunicador. 

«Vuestros platos tenían muchos defectos, no eran agradables al paladar», advertían Pepe, Samantha y Jordi indicando a Pitingo que se había salvado por los pelos. «Uno ya sabe el camino. El otro lo va a descubrir», comentaba Pepe recordando que Lamuño ya había sido eliminado anteriormente. Pero era Raúl el que se venía abajo y se echaba a llorar. «La gente puede pensar que…», acertaba a decir sollozando. «¿Alguien puede darle un abrazo a este tío?», exclamaba Jordi rodeando con sus brazos al concursante.

«Lo vivo todo con una intensidad brutal: mis hijas, mujeres, amigos, proyectos… Me encariñó mucho con las personas», argumentaba Gómez sin dejar de llorar. «Me cuesta hablar. Soy muy disfrutón y me gustaría disfrutar más de esta experiencia», afirmaba. Sus compañeros le animaban desde la grada. «Te queremos mucho, Raúl», elogiaban. Y Pepe sucumbía. «¡Que tío!», manifestaba el chef secándose las lágrimas. «Lo he intentado, pero no he dado la talla en la cocina», se disculpaba Raúl ya más tranquilo. El de El Bohío corregía. «Has dado la talla a nivel humano. Siempre con esa sonrisa, generando buenas historias», ponderaba.

Publicidad

Ya más tranquilo, Raúl se despedía de sus compañeros asegurando que su paso por el concurso, «ha sido un placer absoluto. Me voy feliz de la vida», garantizaba. Lamuño se sumaba a ese sentimiento de agrado. «Mi objetivo era volver a entrar, tenía que quitarme esa espinita que tenía clavada, así que me voy satisfecho», declaraba el actor antes de colgar su delantal junto a su colega. Doble expulsión que deja huérfanos a algunos participantes, y que indica que ya queda menos para que alguien levante el trofeo de esta edición. 

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad