Cuidadito con los 'débiles' en 'El conquistador del Caribe'

Hay un cóctel de sensaciones entre los aventureros de 'El conquistador del Caribe'. Por un lado están aquellos que se sienten defraudados porque la ansiada unificación les queda bastante más lejos de lo que ellos esperaban y, por otro, los que le ven el lado positivo al asunto y se acoplan a sus nuevos equipos sabedores de que el formato puede deparar aún más de una sorpresa. Aquí nada está escrito, ni siquiera el poderío de los nuevos líderes que, como todo, gustan a unos más que a otros. Y lo malo es que llega el momento de ponerlos a prueba, ¡y nada menos que como aizkolaris!

Los Caguama y los Guaraguao se enfrentaron por primera vez a solas. El juego de inmunidad consistía en cortar un tronco con un hacha y trasladarlo en cayuco entre los manglares, para acabar izándolo con la ayuda de una cuerda. Y el desafío fue accidentado, sobre todo para los azules que comenzaron con buen pie, pero acabaron trasquilados. Los Caguama fueron los primeros en cortar el tronco y llevaban bastante ventaja a sus contrincantes, pero se les rompió el hacha y eso los retrasó. «Intentar solucionarlo, vosotros la habéis roto», valoró Julian Iantzi. Nada de repuestos. Los guaraguao supieron aprovechar el traspiés y acabaron ganando el reto.

Las dudas y los enfados salieron a flote entre los azules. Maritxalar, para colmo, no está en su mejor momento, como él mismo reconoció. «Pues pronto empiezas», ironizó Iantzi al ver al líder de bajón. Las estrategias comenzaron a forjarse entre algunos miembros del equipo que ya estudiaban tácticas de cara a las nominaciones. Los rojos nominaron directamente a Isma. Y Esther fue finalmente la condenada por el grupo. Quedaba la decisión del capitán y optó por castigar a Ixku.

El duelo consistía en una autoascensión. Vinculados a una cuerda, el trío debía subir su propio peso tirando del resto de la soga. El objetivo era llegar a cinco banderines dispuestos a diferentes alturas. Isma arrancó muy fuerte subiendo a lo más alto para lograr la enseña, pero a partir de ahí la prueba se le volvió en contra. Esther fue más hábil y consiguió hacerse con tres banderas demostrando gran fortaleza y destreza. «Hay que tener cuidado con los que consideráis débiles», advirtió con tino el presentador.

Ixku peleó hasta el final, pero solo se hizo con dos. La tensión la mantuvo hasta el último segundo Isma que no podía ascender a por el tercer blasón porque se resbalaba. Menos mal que Patxi le cambió los guantes a última hora y logró la meta en el último momento. Eso le salvó de la quema. Ixku fue el expulsado y salió con honor porque se dejó la piel en el intento. «Esto de los favoritos, grandes y fuertes hay que demostrarlo, hoy me podía haber llevado un disgusto grande», reflexionaba Isma ante Esther en el camino de regreso al campamento. Lo dicho, nada está escrito.