'El Conquistador del fin del mundo' ya tiene a sus finalistas

Son los últimos coletazos de la aventura y crece la dificultad. 'El Conquistador del fin del mundo' reunía a sus participantes para informarles de que se enfrentaban al último juego de inmunidad -la final se emitirá este lunes-. Pero no todos llegaban con la misma ilusión. Lobo estaba desmotivado y se notaba. «Estoy agotado. Explicar la prueba y según me parezca la haré o no», amenazaba con la moral por los suelos. «Aquí se trata de estar motivado», arengaba Patxi Alonso. Pero el aliento no calaba. «Yo estoy ya hasta los cojones», replicaba el aragonés visiblemente contrariado. No obstante, decidió luchar.

Una gran cascada, con tres saltos que debían remontar para llegar a la Ikurriña, era el reto. El primer salto era la trepada de una cuerda. El segundo, superar una red y el tercero, una ascensión de cincuenta metros con yumar. La cuadrilla salió con energías renovadas. Sabían que solo tres podían enfrentarse a la ascensión final, puesto que ese era el número de líneas habilitadas. Y, sorprendentemente, Txubi cayó a las primeras de cambio. Se enredó en el segundo salto y acabó el último. Hasta Lobo le ganó.

Anartz, Jokin y Aritz fueron los tres titanes que llegaron a la última parte del desafío. Tocaba tirar de garra y Jokin demostró que no le falta, alzándose con el triunfo. Al vencedor le tocaba pintar la cara de rojo a uno de sus compañeros y señaló a Izeta. Él y Txubi eran, de momento, los duelistas. Los verdes tenían claro que iban a apuntar a un Piche, y Jokin, que lo intuía, quería llevarse a Andrea con él, pero esta vez tuvo que marcharse solo.

Una noche lluviosa y muy fría minó la moral de los aventureros que la sufrieron en el campamento pobre, al aire libre y empapados. La terrible velada afectó de nuevo el ánimo de Lobo. «Me voy a casa hoy. Ahora voy a la asamblea y me voy. Ya he aguantado aquí bastante. Me habéis exprimido hasta los huesos», protestaba el de Magallón. Andrea le miraba mal. «Al menos, vete tú al duelo si te quieres ir. No te pires así, sin más. No es tan difícil entenderlo», reprochaba la única mujer que queda en la banda, exasperada por la actitud de su compañero.

En la asamblea, Lobo aguantó el tipo viendo que las lanzas se clavaban delante de Andrea. «Es lo que hay, cada uno que valore lo que tenga que valorar», lamentaba la joven enojada. «En el peor momento, te toca ser duelista», comentaban los presentadores. «Tengo ganas y rabia», declaraba ella.

Y Lobo, que amagaba con marcharse, cambiaba de tono sabedor de que se había convertido en finalista. «Estoy con mucha ilusión, ha sido una aventura que me ha puesto al límite. Agradezco a los Cóndores que me hayan dado este pase y lo voy a dar todo en la final», prometía. El que se llevó un buen susto fue Jokin al regresar con los suyos. «No me esperaba esto para nada», manifestaba mirando el collar que condenaba a Andrea. La joven, afectada, no quiso ni leer las cartas de sus familiares y amigos. «Quiero estar fuerte», argumentaba.

El duelo era de altura. Los tres nominados debían superar una gran tirolina horizontal de la que debían recoger dos banderines. Una vez con las enseñas, tocaba bajar la montaña y abordar otra tirolina, esta vez vertical. El trío se portó. Txubi ganó la prueba seguido de cerca por Andrea. Izeta fue el perjudicado y, aunque también acabó el lance, fue el último expulsado de la edición. Jokin, Aritz, Andrea, Anartz, Lobo y Txubi viajarán a Ushuaia para disputar allí la ansiada final.

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