Aurah amenaza con desenmascarar a Ángel Cristo en 'Supervivientes': «Lo voy a contar todo»

Aurah Ruiz y Blanca Manchón creen que Ángel Cristo es un traidor. Así, sin paliativos. El hijo del domador no ha dejado títere sin cabeza desde que llegó a 'Supervivientes'. Parece que busque titulares a base de sacar de quicio a los suyos, sin perder nunca la compostura. Su carácter hierático contrasta con los dardos que lanza en ese discurso aparentemente inalterable que colabora a perturbar aún más a sus enemigos. Y lo de ahora son enemigas. «Si se sienten engañadas porque he hecho de agente doble… ¡Pero si con doce años engañé al servicio secreto!», presumía señalando a aquellas polémicas declaraciones que realizó contra su madre, Bárbara Rey, en las que aseguraba que le había hecho fotos al rey emérito sorteando a su servicio de seguridad.

«Ángel, a la guerra no se viene con un tambor, se viene con artillería pesada. Y te lo juro que lo voy a contar todo, todo se va a descubrir», amenazaba Aurah. Él aludido no se amilanaba. «Yo también tengo algo que le va a dejar muy mal no, lo siguiente», rebatía Cristo dirigiéndose a Sandra Barneda que calmaba las aguas. Gorka Ibarguren se sumaba a la fiesta. «Estamos totalmente divididos, los chicos por un lado y ellas por el otro», argumentaba. Y Ángel volvía a la carga. «Para llevarse bien con Aurah hay que seguirle la corriente y pedirle permiso constantemente. Y ya me he cansado», embestía.

Cristo no deja a nadie indiferente y son muchos los que le tienen en el punto de mira. Miri Pérez-Cabrero confesaba que no se fía del concursante. «Se está quitando la careta, todo acaba saliendo», advertía la joven. Y Kiko Jiménez sumaba críticas. «Era cuestión de tiempo. Aurah le dijo a Ángel que no le hiciese hablar... y Ángel se cagó», opinaba desvelando que había visto cómo el hermano de Sofía Cristo le tocaba a Aurah en la mano para frenar la amenaza. Y, por si acaso, apuntaba. «Son cosas muy oscuras», dejaba caer. Y Miri descubría entonces su desconfianza, cuestionando la buena relación que tiene ahora el hijo de Bárbara rey con el participante vasco. «Ángel me dijo que Gorka era lo peor y que era un tío del que no me podía fiar, dejando a Gorka fatal», destapaba ante la sonrisa cómplice de Jiménez.

El que no aguanta más es Arkano. El rapero está roto. «Le ha dado un bajón impresionante», contaba Laura Madrueño. Y el joven estaba desatado. «No quiero estar aquí, es que no quiero. Es tiempo perdido, tiempo que no vuelve. Me sabe mal estar así porque se preocupará mi familia, pero ya está, quiero hablar con el programa. No quiero estar aquí, no puedo», clamaba muy afectado. El protocolo de abandono se activaba y el cantante se ponía en manos del equipo de psicólogos. «Para mí esto está siendo un infierno mental cada minuto», declaraba insistiendo en que se iba. Barneda le brindó la posibilidad de hablar con Laura Matamoros que le animaba y la presentadora le pedía que aguantara hasta el martes. Había una razón, la madre de Arkano está volando hacia Honduras, ajena a la situación, y piensan que su presencia aportará energías renovadas al rapero. Habrá que esperar al martes, con Carlos Sobera al mando, para conocer la decisión del artista de las palabras.

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