'Sálvame' despide a Antonio Canales y el bailarín les canta las cuarenta

La tensión se respiraba en el ambiente y Carlota Corredera anunció que el damnificado era Antonio Canales. «No es cuestión de humillar a nadie, a todos nos contratan para cumplir unas expectativas», valoraba la presentadora antes de sentarse a dialogar con el despedido. Canales recibía la noticia sonriente y aparentemente tranquilo, pero pronto comenzó a largar. «Como dice mi padre: donde no te quieren es donde no te merecen», ironizó, al tiempo que avisaba de que ya estaba negociando con otra productora.

Corredera quiso saber qué sentía y en qué tipo de espacio le gustaría participar. «En un programa que hable de cultura que en Mediaset es difícil: es como follarse a una hormiga y preñarla», juzgó el experto en danza que, viéndose apartado no dudó en lanzar unos cuantos dardos. «Tampoco estamos en horas muy altas de audiencia», exponía con cierta guasa. Y pasaba a refrendar su reflexión: «Aquí he aprendido lo que no hay que hacer y lo que no hay que hacer es hablar a tontas y a locas, hacer un programa aburrido como el que estamos haciendo últimamente. Hay que reinventarse, escuchar a la audiencia, darle un poco más de alegría y no mirarse tanto el ombligo».

El formato vespertino de Telecinco no pasa por su mejor momento y Canales no dudó en echárselo en cara. «Cuando empieza a bajar la audiencia y la gente hace zapping es porque algo no se está haciendo bien. Y no seré yo el culpable de todo con lo poco que llevo, ¿verdad?», cuestionó con sarcasmo. Carlota no daba crédito, pero dejaba hablar al bailarín. «Estamos bajando el share, es el peor verano de su historia, que lo sepa la gente. No se puede vivir de las noticias de ayer y vosotros os empeñáis en seguir con ellas y agotáis a la audiencia», criticaba.

Kiko Hernández preguntó a Canales cuándo se había cansado del programa y Canales se explicó. «Empecé con ilusión y luego ha habido temas y formas que me han desganado. Empecé a perder esa ilusión cuando veo que no hay nada fresco, que todos los días se habla de los mismos temas hasta la saciedad y que empieza a haber una guerra entre productoras en la que a mí no me gusta entrar», razonó. Corredera defendió entonces al programa aseverando que para ella es el mejor. «Ya no somos en número uno, nos están ganando hasta teleseries. Tú vendes humo y yo no, yo cuento la realidad», replicó duro el artista que optó por zanjar la conversación con sorna: «Voy a salir un momento porque tengo un dolor tan grande en el corazón…». Y abandonó el plató.