La transformación digital acelera la recuperación del sector cultural vasco

En su estudio, Jabier Retegi, Ibone Eguia, Mercedes Oleaga e Imanol Aizpuru dividen la industria en dos sectores con «desigual» evolución: el cultural (artes escénicas, audiovisual y multimedia, música, museos y bibliotecas) y el creativo (arquitectura, diseño, moda, publicidad y videojuegos), siendo este último el que aún no ha alcanzado niveles de empleo previos a la pandemia.

Aquellos ámbitos que más relación tienen con lo digital -tanto en la producción como en la comercialización- han mostrado un crecimiento mucho mayor: el empleo en edición, diseño, audiovisuales, televisión, radio, podcast, plataformas de streaming e informática han crecido un 7,66%. «Nos ha dejado una conclusión muy clara: o te adaptas al medio virtual o las probabilidades de un crecimiento sostenido en el futuro son bastante dudosas», señala Retegi.

El estallido de la Covid provocó la desaparición de 243 empresas del sector, una reducción de hasta 563 empleos y una caída en la facturación del 30%. Sin embargo, el número de firmas no solo se ha recuperado de esta caída, sino que ya ha superado (un 0,2%) las que existían antes de la pandemia: si en enero de 2020 había 16.886 empresas, dos años después ya sumaban 16.924. Y como consecuencia, el porcentaje de empleo ha seguido una tendencia positiva al pasar del 3,69% al 3,75% gracias, en mayor medida, a las industrias culturales. El estudio refleja una especial aceleración en 2021, cuando ese crecimiento se tradujo en 794 puestos más de trabajo.

El efecto de la crisis fue desigual y la recuperación, por tanto, también lo ha sido. «El regreso del público a la música, cines y artes escénicas probablemente haya beneficiado a las industrias culturales, mientras que el ámbito creativo, más enfocado a los servicios a empresas, ha ido más lento o se ha perdido». Es por eso que el vagón de cola lo protagonizan la arquitectura y el libro que, en estos dos años vieron reducidas sus empresas (174 y 90, respectivamente) e intensificaron sus pérdidas.

«La gente lee mucho más, pero lo hace adquiriendo libros en empresas con sede fuera de la CAV. Todos conocemos plataformas que te traen el libro a casa... de ahí el dato negativo», justifica Retegi. En el otro extremo, las artes visuales, lo multimedia y la música crecieron positivamente durante el 2021, como también lo hicieron el sector publicitario, el diseño y las empresas de videojuegos, que en 2022 ya sumaban 13 compañías en Euskadi.