Comienza el festival

La escenografía ofrece una acertada contraposición al presentar la problemática del desperdicio de comida mostrando, por un lado, un espacio audiovisual que juega con las sombras del hambre y, por otro, una mesa en la que el despilfarro toma vida. La pieza funciona en su denuncia social a pesar de que el karaoke final promete una catarsis que no termina de estallar.

En la Casa de la Cultura Ékoma se mete al público en el bosillo por su impecable interpretación. 'Una comedia de estos tiempos' lanza una crítica a las políticas totalitarias desde la perspectiva de dos ancianos en una residencia. Si bien a la dramaturgia le falta profundidad al conectar el presente con el pasado, Aitor Perez y Javier Liñera conquistan por su perspicaz sentido del humor.

El Mono Habitado ofrece en el Palacio de Zulueta una experiencia cautivadora con 'La buena letra'. En esta pieza una pareja controla las vidas de sus vecinos reescribiendo las cartas que estos reciben por el 'bien' de la comunidad. Un texto que atrapa por su cuidada narrativa llena de matices metafóricos.

A pesar del tímido arranque del festival, este primer asalto del Off-Lokal pone en relieve el talento de los artistas locales al ofrecer una velada de microteatro con historias que invitan a la reflexión y al disfrute.