El Fantasma de la Ópera habita en el Arriaga

El compositor europeo de mayor éxito comercial del siglo XX ha cautivado desde entonces a 160 millones de personas en 195 ciudades y 21 idiomas. El musical más longevo de Broadway, donde se mantuvo en cartel durante 35 años (14.000 funciones), se llevó al cine en 2004 en una olvidable película con Gerard Butler y Emmy Rossum. El año pasado se estrenó en el Teatro Albéniz de Madrid una versión en la que el acosador más célebre del teatro se sometía a una relectura feminista. El Fantasma sigue haciéndole 'luz de gas' a Christine, manipulándola y alejándola de quienes quieren protegerla. Pero ya no es un monstruo sobrenatural, sino un hombre obnubilado por el amor.

Andrew Lloyd Webber dio su bendición a esta versión producida por la promotora española Let's Go y con Antonio Banderas en el ajo: el actor fundó con el británico la empresa Amigos Para Siempre, con el fin de levantar musicales en todo el mercado hispanohablante con nuevas traducciones y montajes de sus clásicos. 'El Fantasma de la Ópera' abandona por una semanas el Albéniz y recalará en uno de los teatros más idóneos para esta historia: el Arriaga bilbaíno. Será el espectáculo más demandado esta Aste Nagusia. 38 funciones del 14 de agosto al 15 de septiembre con precios que van de los 30 a los 69 euros.

La preventa ya está yendo «como un tiro», apunta Ignacio Malaina, director gerente del teatro. «El musical más visto y exitoso de todos los tiempos sale por primera vez de Madrid, pero esto no es una gira», remarca. La productora Elena Garzón recuerda que estamos ante la primera adaptación que cuenta con el plácet de Lloyd Webber, testada ya ante 180.000 espectadores madrileños. El reto técnico pasa por adaptar un escenario giratorio de 4.500 kilos al Arriaga y coordinar a los 75 técnicos que, por ejemplo, logran que un actor se cambie de vestuario y peluca en 40 segundos.

Los recientes Premios Talía de las artes escénicas han recompensado la dirección musical de Julio Awad y la interpretación de Talía del Val, que ha pasado por el escenario del Arriaga con 'Mamma mía' y 'West Side Story'. Awad permanece estos días en Bilbao celebrando audiciones para seleccionar a los 14 miembros de la orquesta, que estará compuesta por músicos locales. Para la actriz y soprano de 'La bella y la bestia' y 'Los miserables' esta obra es «como la sala de Las Meninas en el Museo del Prado: sabes que va a ver algo bien hecho, que conoces a través del tiempo». «Quieres volver a escuchar las canciones y a vivir las catarsis del viaje. Esta obra es preciosa y no va a morir nunca».

El cantante y actor argentino Gerónimo Rauch lleva dos décadas de éxitos en musicales: 'Los miserables', 'Jesucristo Superstar'... Ya se puso la máscara del Fantasma en el West End y encuentra más «real y visceral» interpretarlo en castellano. «Es una historia épica con una partitura maravillosa. Pero la clave quizá sea que puedes empatizar con el rechazo, porque todos hemos sido rechazados en algún momento de nuestras vidas. Dolor, amor prohibido... A pesar de tanta belleza, 'El Fantasma de la Ópera' habla de sentimientos muy primitivos».

El matrimonio entre Andrew Lloyd Webber y Sarah Brightman terminó a principios de los noventa, pero 'El Fantasma de la Ópera' siguió representándose hasta calar en la cultura popular. Su logotipo, la máscara del fantasma, se ha convertido en símbolo universal del teatro musical y canciones como 'The Music of the Night' o 'All I Ask of You' son clásicos. Esta nueva versión no es tan espectacular como la que recaló en el teatro Lope de Vega de Madrid en 2002, pero mantiene de otra manera más imaginativa y sintética todos sus elementos icónicos: el espejo, la góndola que conduce a la madriguera del Fantasma y la gigantesca lámpara del techo que el protagonista deja caer sobre el patio de butacas.