San Sebastián no devolverá los cuadros que Zuloaga donó al museo San Telmo

Los servicios jurídicos municipales han emitido un informe que avala la desestimación en base a tres consideraciones. La primera, que Suárez Zuloaga «formula su reclamación como descendiente directo del pintor Ignacio Zuloaga y en interés y beneficio de la comunidad hereditaria formada por los herederos de los hermanos Lucía y Antonio Zuloaga, pero no acredita la existencia de dicha comunidad, ni identifica cuáles son sus miembros».

El segundo elemento que sostiene la resolución del Gobierno municipal es que la donación se produjo en 1967 y conforme a la legislación vigente, «transcurridos más de treinta años desde que se aceptó la donación, no cabe entrar a analizar la reversión solicitada».

Por último, el informe jurídico asegura que «las condiciones impuestas en su día por los donantes fueron cumplidas, y también hoy se cumplirían, de ser exigibles». En este sentido, recuerda que en San Telmo existe una sala dedicada a Zuloaga, «debidamente identificada con su nombre».

El Gobierno municipal remarca además que el museo ha mantenido una relación «constante y continua» con la familia Zuloaga a través de una de sus miembros, María Rosa Suárez Zuloaga, que fue la «interlocutora del museo para la gestión de la obra del artista y conocedora de la participación de las obras donadas en distintas exposiciones, lo que contó con su consentimiento».

Tres 'ramas' familiares

La decisión del Ayuntamiento del San Sebastián sigue la misma argumentación que ha expresado desde que Rafael Suárez Zuloaga reclamó la devolución de las obras de arte. Hace un mes el concejal de Cultura, Jon Insausti, anunció que iban a solicitar un interlocutor que representara al conjunto de los herederos de Zuloaga, porque entiende que hay miembros de la familia de Zuloaga que no comparten la reclamación.

Tal como adelantó este periódico el 19 de febrero, una de las tres 'ramas' de herederos de Zuloaga, encabezada por Rafael Suárez de Zuloaga, presentó ante el Ayuntamiento una reclamación en la que solicita la reversión de siete obras del creador eibarrés que fueron donadas por la familia a San Telmo en 1967.