![La risa de Cabu resuena de nuevo en París](https://s1.ppllstatics.com/elcorreo/www/multimedia/202010/13/media/cortadas/cabu13-kaAC-U12044078317586C-1248x930@El%20Correo.jpg)
![La risa de Cabu resuena de nuevo en París](https://s1.ppllstatics.com/elcorreo/www/multimedia/202010/13/media/cortadas/cabu13-kaAC-U12044078317586C-1248x930@El%20Correo.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Beatriz juez
Martes, 13 de octubre 2020, 01:19
La risa del caricaturista francés Cabu resuena en París, cinco años después de que los hermanos Saïd y Chérif Kouachi convirtieran la redacción de la revista satírica 'Charlie Hebdo' en una morgue, como venganza por la publicación en 2006 en el semanario de las polémicas ... caricaturas de Mahoma. Cabu (1938-2015) fue asesinado el 7 de enero de 2015 a los 75 años por los hermanos Kouachi junto a sus compañeros de 'Charlie Hebdo', entre ellos, los caricaturistas Charb, Honoré, Tignous y Wolinski.
El Ayuntamiento de París le rinde ahora homenaje con una exposición titulada 'La risa de Cabu', la primera gran retrospectiva desde el asesinato de uno de los dibujantes más populares y combativos de la prensa francesa. «La risa era Cabu. Era su razón de vivir», recuerda en el catálogo de la exposición Laurent Sourisseau, conocido como Riss, actual director de 'Charlie Hebdo'.
Cinco años después de los atentados, la revista de humor sigue de actualidad. Se celebra estos días en París el juicio de los atentados de enero de 2015 ('Charlie Hebdo', Montrouge e Hyper Cacher). El pasado 25 de septiembre el paquistaní Zaheer Hassan Mahmoud acuchilló a dos personas delante de los antiguos locales de la publicación. El agresor ignoraba que la redacción del semanario satírico se había mudado a otros locales secretos tras el atentado de 2015.
Mahmoud estaba «furioso» porque 'Charlie Hebdo' había vuelto a imprimir a principios de septiembre las caricaturas de Mahoma, que el diario danés 'Jyllands-Posten' publicó en 2005 y que el semanario francés había reproducido en 2006, así como la portada del número 712 de la revista diseñada por Cabu: «Mahoma desbordado por los integristas. 'Es duro ser amado por idiotas'», proclama afligido el Mahoma de Cabu tapándose los ojos. Ese número les puso en el punto de mira de los integristas islámicos.
¿Pero quién era Cabu, pseudónimo de Jean Cabut? «Marcó a los jóvenes adolescentes cuando trabajaba para la revista 'Pilote'» con la creación del personaje Le Grand Duduche, un estudiante de instituto repetidor, bromista y al que solo le interesan las chicas, explica Jean-François Pitet, comisario de la exposición.
«También marcó a la gente porque en 'Hara-Kiri' y 'Charlie Hebdo' hacía caricaturas políticas que han seguido desde finales de los años 60 hasta el final de su vida. Y marcó a generaciones de niños porque durante diez años trabajó en un programa de televisión donde enseñó a los niños a dibujar», cuenta Pitet. «Cabu se parecía a Le Grand Duduche. No envejecía, como un personaje de cómic».
El humorista publicó en 'L'Enrangé', 'Hara-Kiri', 'Charlie Hebdo' y 'Le Canard Enchaîné' innumerables caricaturas de políticos. «Todos estaban encantados porque era el mejor caricaturista francés», explica Pitet.
En la exposición se puede ver una caricatura que hizo a los 12 años del presidente Vicent Auriol (1947-1954). «Mirar los dibujos que hizo de los presidentes es mirar la historia de la Quinta República» francesa, según el comisario de la muestra, desde Charles de Gaulle hasta Emmanuel Macron, pasando por François Mitterrand, Jacques Chirac, Nicolas Sarkozy y François Hollande
«Solía dibujar a Sarkozy con dos cuernos. Y un día Sarkozy se lo encuentra en la Asamblea Nacional. Cabú estaba ahí para dibujar, y Sarkozy le dijo: 'Mi hijo me pregunta que por qué me dibuja usted con cuernos, como diabólico'. Y Cabu le respondió: 'Porque usted es un poco diabólico, señor ministro'», cuenta Pitet como anécdota.
En sus 60 años de carrera, Cabu libró muchos combates con sus diseños: a favor del pacifismo, de la ecología y, sobre todo, a favor de la libertad de expresión. Cabu consideraba que «no hay límites al humor que está al servicio de la libertad de expresión, porque allí donde el humor se para, bien a menudo se deja sitio a la censura o la autocensura».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.