«La igualdad en el cine no es una moda»

«Las directoras de cine hoy son el mismo porcentaje que cuando nació la asociación hace diez años: el 7%», lamenta Virginia Yagüe, presidenta de la Asociación de Mujeres Cineastas y Medios Audiovisuales (CIMA), que ayer presentó las acciones que adoptará el colectivo durante la gala de hoy. Sus socias repartirán 1.800 abanicos rojos para denunciar «una situación realmente alarmante y de claro desequilibrio, que exige la implicación de toda la sociedad». En un dardo a los presentadores de la gala, Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla, que anunciaron «apuntarse al carro del feminismo», las directoras recuerdan que la igualdad es «una cuestión vital, no una moda».

Los políticos volverán a acaparar flashes y chistes durante la ceremonia. Regresa el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, tras su ausencia el pasado año, cuando el partido estaba dirigido por una gestora. Junto a él estarán el líder de Ciudadanos, Albert Rivera; el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias; y el coordinador general de Izquierda Unida, Alberto Garzón. Como representante del Gobierno ha confirmado su asistencia el ministro de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, que acude también en calidad de 'conseller' de Cultura de Cataluña.

'Handia' es la película que acapara más candidaturas, 13, pero no es la favorita para hacerse con la estatuilla principal. La cinta en euskera más vista de la historia -está a punto de rebasar los 100.000 espectadores- tiene muchos boletos para vencer en los apartados técnicos. Y el durangués Eneko Sagardoy, de 23 años, también cuenta con posibilidades para hacerse con el Goya a actor revelación por dar vida al Gigante de Altzo. Jon Garaño, Aitor Arregi y Jose Mari Goenaga, socios de la productora donostiarra Moriarti, ya hicieron historia con 'Loreak', que fue sucesivamente la primera película en euskera que optaba a la Concha de Oro, al Goya a la mejor película y al Oscar de habla no inglesa representando a España.

«No vamos con la presión de ser ganadores, pase lo que pase será muy bonito», adelanta Jon Garaño. Medio centenar de miembros del equipo estarán sentados en el hotel Madrid Marriott Auditorium. En total, unas 120 personas entre familiares y amigos se han desplazado desde Donosti y acudirán a la fiesta que la distribuidora A Contracorriente ha organizado en el mismo hotel para celebrar el previsible éxito de 'Handia' y 'La librería', ambas en su catálogo. «Estaremos tranquilos. Vamos con la sensación de que tener 13 nominaciones está muy bien, y todo lo que venga después será bienvenido. Eso sí, si no ganamos ni un Goya nos pondremos tristes, no te voy a engañar», confiesa Garaño. «Yo lo comparo con las notas escolares, debe ser un mecanismo de defensa; ganar un solo Goya ya es como sacar un sobresaliente y todo lo demás, notables».

Los autores de 'Handia' están inmersos en la preproducción de 'La trinchera infinita', su primera película en castellano. Ya han hecho una lectura de guion con Antonio de la Torre y Belén Cuesta, protagonistas de esta historia de un maquis de la Guerra Civil española que comenzará a rodarse en primavera en Andalucía.

Si nos fiamos de las casas de apuestas, 'Verano 1993' es la virtual ganadora del Goya a mejor película. Por cada euro apostado por ella se pagan 1,72, mientras que por 'Handia', 5,50. La ópera prima de Carla Simón ha ido encadenando galardones desde que ganó el premio a la mejor ópera prima en la Berlinale. Su mérito, la sinceridad de su sustrato autobiográfico -la realizadora perdió a sus padres de niña, víctimas del sida- y la sensibilidad que demuestra a la hora de plasmar la nueva vida de la pequeña protagonista.

'La librería', de Isabel Coixet, suena insistentemente como premiable en las últimas semanas. Tiene tres puntos a su favor: ha sido un éxito de taquilla, cuenta la historia de una mujer que desafía el poder establecido con el arma de la cultura y su directora ha estado en el ojo del huracán por sus críticas al independentismo catalán. A su lado, 'El autor', una sátira negrísima sobre los creadores, aparece demasiado cultureta.

El filme de Manuel Martín Cuenca sí que le reportará el Goya a su protagonista, Javier Gutiérrez, inconmensurable como aspirante a escritor que va mutando del patetismo a la psicopatía. El premio a la mejor actriz también está cantado: Nathalie Poza, ejecutiva cocainómana obligada a reencontrarse con su padre cuando este le anuncia que le queda poco tiempo de vida en 'No sé decir adiós'. Ojalá que el galardón sirva para dar una nueva carrera comercial a una cinta que apenas ha recaudado 72.000 euros.