«Llegó la primavera y la saludan los pájaros con alegre canto». Así se inicia el soneto que escribió Antonio Vivaldi, o al menos atribuido al compositor veneciano, en el que basó el primero de los conciertos de 'Las cuatro estaciones'. Lo mismo hizo con ... el resto, con 'El verano', 'El otoño' y 'El invierno'. Esos versos que precedían a una gran obra maestra musical parecen demasiado ligeros, alejados de la popularidad de la partitura. Sin embargo, son sonetos que se pueden elevar a un nivel excepcional cuando quien los recita es Núria Espert, una de las mejores actrices de teatro españolas y la carrera más longeva al gran nivel sobre las tablas, junto a Lola Herrera. Espert, a sus 88 años, se sube este jueves de nuevo a las tablas del Teatro Principal de Vitoria (19.30 horas, 9-30 euros) para una actuación más cercana a un recital, ya que gran parte la copa la interpretación del popular concierto de Vivaldi por parte de La Tempestad, reconocido grupo de interpretación historicista.
En el Principal
Actuación de La Tempestad con Núria Espert
Concierto de 'Las cuatro estaciones', de Vivaldi, con recital de la reconocida actriz.
15 de junio, a las 19.30 horas
9-30 euros, dependiendo de la localidad. Con descuentos habituales.
Este espectáculo despide el ciclo 'Grandes Conciertos' y conjuga el recital con la interpretación en vivo. Como cuenta Espert, estos versos escritos son mucho menos conocidos que la parte tocada. «Fueron recuperados mucho más tarde. Son muy bellos, muy inocentes y ponen de relieve la belleza de la vida campesina. Vivaldi mira a los campesinos con amor y con humor, los ve llorar, y los ve bailar...», explica Nuria Espert a este periódico cuando se le pregunta qué tienen de especial esos sonetos. Ella es la introductora, los recita y da paso a la interpretación de las diferentes piezas.
Público vitoriano «generoso»
También a mitad de la actuación se produce un «momento importante» en el que Espert pone voz a un soneto de San Juan de la Cruz. Bajo la dirección artística de Silvia Márquez, sobre el escenario se encuentran Pablo Suárez como violín solista y Guillermo Peñalver como flautista solista. A ellos se le suma la formación habitual de La Tempestad con Iñigo Aranzasti, Lorea Aranzasti (violín), Antonio Clares (viola), Guillermo Turina (violonchelo) y Jorge Muñoz (contrabajo). «El peso del concierto me saca del mundo de la actuación y me coloca en el de disfrutar. Yo misma me convierto en una espectadora que no puede dejar de emocionarse, incluso después de haberlo oído tantas veces».
Por el momento, la acogida de esta gira ha sido inmejorable. «Es una velada cultural y espiritual que hemos llevado por muchos sitios en España con un resultado espléndido. La gente pide y necesita también de esos momentos íntimos que son los de lidiar con la música que puede llamarse inmortal». Espert reconoce que a veces es complicado compaginar estos compromisos con la gira de 'La isla del aire', dirigida por Mario Gas. «Estoy también feliz con este grupo y viajando y disfrutando que es un paseo detenido por este país tan cambiante y tan bello. Ocurre que de pronto estás en el norte y de pronto en el sur y es un cambio fortísimo». Al público vitoriano lo define como «generoso». «Vengo sabiendo que voy pasar un día maravilloso y estoy excitada».
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