Triple Zero Band: «Con la crisis de los 40 empiezas a ver que el tiempo y la energía no son infinitos»

Triple Zero Band han lanzado ocho cortes que se pueden vincular con los locales The Melted Klocks ('Save my soul'), con el Eric Gales hendrixiano ('Out of control'), con Danko Jones ('Let it roll'), con el funk aindiado algo The Cult ('Balls out'), con las baladas de Guns N Roses ('True love'), con el hard rock vertiente AOR de los también locales Kotta ('Give me something'), y con The Pirates y ZZ Top (en el octavo y último corte, 'The last round', un cover de los baracaldeses Lomoken Hoboken).

Tras oírlo en Spotify la plataforma ha seguido escogiendo canciones de Deep Purple, Band Of Rascals, Tarque, Matt Bradford… O sea que autenticidad no le falta a esta Banda del Triple Cero, cuyo líder Íñigo Garrido, alias Garry, se encarga de presentarla en la siguiente entrevista.

¿Quiénes sois los de Triple Zero Band? Edad, curros…

Somos tres tipos de más de 40 años y menos de 50, con un pasado musical común. Alex (batería) es mecánico, Aitor (bajista) es técnico de sonido y albañil, y me ahorro la bromita de Bustamante, y yo (Garry, voz y guitarra), ingeniero. Y casi se me olvida: los tres somos músicos, si se nos permite decirlo.

Claro.

Hemos pasado por algunas formaciones en Bizkaia y nos unió el funk. Cosas de la vida...

¿Cómo se llamaban esos grupos anteriores? Por si conozco a alguno. ¿Acaso acabasteis mal con ellos?

Nada de acabar mal, no los ha nombrado porque ninguno de ellos tuvo mucha relevancia. Aitor estuvo en Cotton Fields, Álex en OCB, y los tres estuvimos en Wanna Funk.

¿Y cómo empezasteis esta banda?

Como se empieza casi siempre. El grupo anterior, Wanna Funk, se había disuelto unos años atrás y nos picaba el gusanillo. Además había algunas cosas en las que coincidíamos los tres: queríamos simplificar la formación al máximo, yendo al formato trío, y volver a nuestras raíces haciendo el mejor homenaje posible a los grupos de rock que más nos han marcado. Buena parte de esta historia la cuenta la canción 'Brothers' de nuestro primer disco, que lleva ese mismo título y se centra en aquel reencuentro.

¿Y por qué el nombre de Triple Zero Band? Ceros a la izquierda no, ¿verdad?

¡Lo somos, probablemente! Aparte de eso, queríamos reflejar que somos un trío, que es la parte obvia. Además nos enteramos de que el 000 era el número de emergencias en Australia, así que el incendio lo ponemos nosotros. Y también empezaba a sonar este nombre como una manera de denominar productos artesanales, a los kilómetro 0, los hechos en casa. Sin embargo, cinco años después se asocia mucho más a cosas light, bajas en calorías…

Ja, ja, ja…

Así que vamos a tener que adaptarnos a los nuevos tiempos y ponernos a régimen. Algún día de estos...

¿Sois de Asua?

En Asua es donde ensayamos, justo debajo de los Chromaticity Studios. Así que se puede decir que esa es nuestra segunda casa. Alex y Aitor son de Barakaldo, y Aitor de Retuerto, ojo. Yo soy de Bilbao pero guerniqués de adopción desde hace ya casi 20 años

Tenéis dos discos ya. ¿Diferencias entre ambos? ¿Por simplificar se puede decir que el primero, 'Brothers', es más sureño y este segundo, 'All in', es más blusero?

Para nosotros el nuevo supone seguir haciendo lo mismo pero más y mejor: un sonido más contundente, una producción aún más cuidada, mejores temas, más memorables, letras más profundas, más colaboraciones de la jet set que nos rodea… Y estilísticamente queríamos mantener la onda de blues-rock, rock sureño, hard rock… No pensábamos en hacer un disco más bluesie, pero si el resultado sugiere eso, mola.

¿Por qué cantáis en inglés? ¡Ya os vale!

Indeed. No es por ir de listos, al contrario. Nos decidimos por el inglés porque consideramos que la pronunciación, los clichés y las frases hechas, contribuyen de alguna manera a conseguir la sonoridad de los grupos que hemos escuchado toda la vida. De hecho, creemos que los grupos que consiguen ese sonido de rock de raíces utilizando un idioma diferente tienen un mérito aún mayor. Hay que ser muy bueno con las letras, porque no siempre funciona.

¿De qué van las letras de 'All in'?

Un poco de todo. Pero es verdad que en general hablan del momento vital en el que hay cosas que te hacen muy feliz, otras que te cabrean mucho, y casi ninguna te deja indiferente. Debe de ser que nos estamos haciendo viejos.

Menos de 50 no es para tanto…

En general el disco gira en torno a eso, pero hay una excepción. Un invento que esperamos sea un punto de inflexión en la historia de la música. Una propuesta tremendamente atrevida. Una genialidad que nunca antes se le había ocurrido a nadie: una balada que habla de amor, ja, ja, ja…

Imagino que te refieres a 'True love'.

Así es.

Garry, ¿y de qué van por ejemplo las letras de 'Balls out', 'Let it roll' y 'Living rock and roll'?

'Living rock and roll' es una de esas canciones del disco que refleja cómo se siente un roquero con la crisis de los 40. Sigues con mucha ilusión y ganas, y con otra madurez, aunque ya empezando a ver que el tiempo y la energía no son infinitos.

Vaya…

'Balls out' significa literalmente 'balones fuera', aunque no estoy seguro de que esta expresión exista como tal en inglés. La canción es una crítica salvaje a esa actitud victimista y destructiva, a esa tendencia natural de culpar a los demás de nuestros propios problemas. Es algo que vemos muy a menudo por ahí: hacer lo mínimo posible, criticar al máximo a los demás, y esperar de ellos lo que tú nunca harías. Es que me pongo enfermo sólo de pensarlo.

Ya, muchas canciones actuales están llenas de letras así. ¿Y 'Let it roll' de qué trata?

'Let it roll' es la historia de un buscavidas. No es mal tipo, pero es un poco canalla y tiene tendencias algo perversas que le terminan pasando factura y a veces se arrepiente.

Oye, ¿estuvisteis en los Screaming Cheeath Wheelies hace un par de sábados en la Sala BBK? La pregunta se me ha ocurrido por el título de la primera canción del nuevo disco: 'Save my soul'.

¿Qué demonios es eso? ¿El nombre de una hamburguesería de Utah?

Ejem…

Al margen de coñas, estamos viendo que tienen unas influencias que coinciden mucho con las nuestras. Y además ellos son famosos. Apuntado, gracias.

Sois un power trio con fuerte presencia de la guitarra, ¿no?

Hombre, no conocemos ningún power trio con fuerte presencia de la flauta travesera.

Ahí has tenido más gracia.

Pero además fíjate en quiénes nos acompañan en el disco: Pedro J Monge, Ibai García, Batiz… ¿Cómo no dar protagonismo a la guitarra con estos titanes? Yo hago lo que puedo, y estar rodeado de ellos es una maravilla porque me obliga a ponerme un poco las pilas.

Ya, por eso lo decía: aunque sois un trío en algunas canciones suena más de una guitarra, la tuya y la de los invitados.

Así es, en las cuatro canciones que cuentan con invitados a la guitarra, al menos el solo principal es todo suyo.

¿Cómo habéis contactado con Carlos Escudero, de Vhäldemar, y con Batiz, ex Fitipaldis, por centrarnos en dos?

All In… A Batiz le conocemos personalmente desde hace unos años. Vive por aquí cerca (Gernika) y es un tío entrañable. Necesitábamos unas buenas tomas de guitarra slide para complementar la armónica de Carlos Jover en 'Living rock and roll', y nadie mejor que él para hacerlo. Ha sido muy generoso con nosotros.

¿Y Carlos Escudero?

Carlos es miembro honorífico de Triple Zero Band. Gran amigo de la banda y una persona que nos ha ayudado de verdad y de forma siempre desinteresada. Es la voz del heavy metal en Bizkaia y eligió colaborar en la balada del disco. Siempre nos rompe los esquemas.

Ajá.

Si es posible también me gustaría mencionar la colaboración más importante del disco, la de Manuel Monge (el difunto guitarrista de los baracaldeses Lomoken Hoboken, alias El Oso), que bajó un rato de ahí arriba para tomarse la última ronda con nosotros: la última canción del disco, 'The last round', es versión de Lomoken Hoboken, un homenaje a ellos.

¿Vosotros sois un grupo hostelero o llegaréis más allá? Yo creo que paradójicamente eso del inglés os limita la proyección natural…

Somos hosteleros, sin duda. Somos excelentes bebedores de cerveza y vino, y amantes de la gastronomía en general. Pero nos han dicho que sale gratis soñar con tener alcance internacional, así que… ¡soñemos!

Habéis tocado alguna vez en otros tinglados más allá de los bares.

Es cierto que tocamos en bares, con orgullo además, y aunque no hemos hecho muchos escenarios grandes, sí que hemos participado en algún festival, como el Areatza Musik & Beer y el Frankens Fest, y en fiestas locales de municipios como Bilbao, Barakaldo, etc.

Tenéis conciertos a la vista para divulgar el nuevo disco.

Sí. Vamos a empezar visitando unos cuantos garitos. En diciembre pasaremos por Ziordia (Etxaleku), en enero por Sopela (Lataska) y Algorta (Piper's), y hay algunos bolos más que ya iremos confirmando. Después caerá alguna sala. Y más tarde, el horizonte.

¿Cuántos bolos vais este año?

Este 2023 han sido unos 15, y en 2022 fueron algo más de 20. No llegamos a 30 pero por ahí anduvimos.

Vídeo de la canción 'Let it roll', rodado en los Chromaticity Studios y con la participación de todos los colaboradores del disco: Pedro J Monge y Carlos Escudero de Vhäldemar, Lander Lourido de Moonshine Wagon, Aritza Castro, Charlie Santiago, José Alberto Batiz, Carlos Jover, Alberto Núñez, Ibai García, y el espíritu del difunto Manuel Monge, alias El Oso.