«Si ahora sueno más serio es porque la vida también lo es», dice Joe Henry

Basculando entre el country, el blues, el soul o el jazz, Henry ha tenido entre sus colaboradores a luminarias como T-Bone Burnett, The Jayhawks, Van Dyke Parks, Allison Rusell, Daniel Lanois, Marc Ribot o Bill Prisell y ha ejercido de productor en discos para artistas de la talla de Elvis Costello, Solomon Burke, Bonnie Raitt, Salif Keita, Billy Preston, o Joan Baez. Con proyección al cine y la televisión, sus humanistas composiciones han ido derivando hacia un sonido más esencialista, evocador, íntimo y sereno que se ha concretado en 'All the Eye Can See', hermoso último disco grabado con más de veinte colaboradores (Lanois, Ribot o Frisell, entre ellos) durante la pandemia y que, tras superar un cáncer de próstata, se ha lanzado a recrear en una gira de pequeño formato con tres únicas fechas peninsulares. Tras su inicio en Barcelona, sus canciones intimistas de «amor, pérdida, miedo y perdón» empaparán como lluvia la Sala BBK con el respaldo instrumental de Levon Henry, uno de los hijos nacidos de su matrimonio de más de 30 años con la hermana de Madonna, Melanie Ciccone.

- Estoy encantado de volver a Bilbao y al País Vasco, donde disfruté de una de las mejores comidas de mi vida. Sólo desearía poder recordar exactamente dónde. Para este tour voy acompañado por mi hijo, Levon que es un saxofonista y clarinetista asombroso; además de un notable compositor y arreglista. No hay nadie con quien preferiría compartir escenario», evoca en vísperas de su estreno en Barcelona, desde su nueva morada en la costa de Maine.

- Parece que su hijo Levon se ha convertido en su escudero musical. Debe ser muy especial compartir con él conciertos y grabaciones

– La palabra 'especial' apenas roza la superficie de lo significativo que es colaborar con Levon. No hay una persona viva cuya opinión sobre lo que hago signifique más para mí, y no podría hacer sin él todo lo que imagino.

– Es un apasionado de los micros e instrumentos antiguos. ¿Hay alguna guitarra 'vintage' que siempre lleva consigo en gira, incluso siendo arriesgado por su valor emocional o real?

–Solía hacer giras únicamente con guitarras muy antiguas: mis acústicas Gibson de cuerpo pequeño favoritas de principios de los años 1930. Pero más allá del riesgo de dañarlas, descubrí que el viaje afectaba mucho la estabilidad de la afinación y la entonación. Fue muy estresante; tanto que diseñé una nueva guitarra con la gran compañía Collings (de Austin, Texas) y con la ayuda de mi distribuidor de instrumentos favorito, Mark Stutman, de Folkway Music en Ontario,. Esta basada en las guitarras Martin triple 0 de finales de los años 20 y en mi querida Gibson Nick Lucas Special de 1931. Es un instrumento maravilloso que puede soportar los rigores de la carretera.

– Tras haber superado un cáncer de próstata hay que interesarse por su salud. Debe encontrarse bien al salir de gira.

– Gracias por preguntar. Sí, me encuentro muy bien, de lo contrario no podría estar de gira. Encadenar viajes, que son duros a cualquier edad, y más aún en la mía, puede ser brutal para el cuerpo y el espíritu. Pero, por regla general, me he impuesto como norma salir a tocar por períodos de tiempo más cortos; y haciendo lo mejor que puedo para mitigar los aspectos estresantes de la vida de gira. Pero, como sabemos, nada que valga la pena está exento de riesgos.

– ¿Ha afectado esa experiencia y el retiro obligado en casa durante la pandemia a su perspectiva de la vida y la música?

– No puedo decir que haya cambiado mi perspectiva sobre la vida y el arte y su relación simbiótica: ya sabía que el arte, y más específicamente la música, era esencial para nuestra resistencia y la conexión entre nosotros; pero el encierro definitivamente me inspiró a aprender nuevas formas de grabar. y ha ampliado mi pensamiento.

– El resultado ha sido un álbum íntimo, sereno y esencialista como 'All The Eye Can See'. ¿Cómo lo definiría?

– Es verdad, creo que es un disco intensamente íntimo y sería una tontería no observar que la pandemia tuvo algo que ver con eso, dado que limitó la movilidad y las relaciones para todos. Y supongo que eso me invitó a observar muy de cerca la verdadera naturaleza de la conectividad matizada entre todos nosotros, pero como siempre, no fue una decisión consciente que tomé antes de escribir o grabar el álbum. Es simplemente algo que reconocí durante el proceso. Siempre trato de hacer lo que las canciones me piden.

– ¿Cómo ha llevado cambiar a la fuerza el proceso creativo, sustituyendo la interacción física por el intercambio de archivos digitales con sus múltiples colaboradores?

– Sí, la pandemia me obligó a cambiar de método. Siempre he sido un productor de discos en vivo, encontré inspiradora la nueva forma de trabajar pero nada reemplazará jamás lo que significa estos todos juntos enfocados en lo mismo, descubriendo una canción en tiempo real.

– ¿Cuál es su filosofía al componer y producir música? Su sonido parece cada vez más espacioso y esencialista.

–Mi filosofía es simplemente reunirnos y tener una sesión que invite al espíritu de una canción a entrar en la habitación. Nunca intento tener una idea preconcebida para una canción o un proyecto. Intento y prefiero que las canciones me cuenten sus ideas. Sólo estoy tratando de ser un sirviente obediente para ellas. Como productor de artistas de todo tipo hago todo lo que puedo para concretar esa entrega a la atmósfera de la canción.

– La evolución constante de la tecnología no parece haber alterado su enfoque, más bien al contrario.

– Como creadores de discos, tenemos que recalibrarnos constantemente en función de nuevas tecnologías de grabación, pero si bien eso afecta el proceso, sigo creyendo que nuestro trabajo sigue siendo básicamente el mismo: hacer que algo hermoso y significativo surja de un par de altavoces y punto.

– Su voz suena más seria, madura o calibrada emocionalmente ¿Cómo ha evolucionado tu principal instrumento a lo largo de los años?

–Creo que ahora soy mejor cantante de lo que solía ser. y si es cierto que sueno más serio, es probable que sea porque las canciones lo son. Y también porque la propia vida, se ha vuelto, en muchos sentidos, más seria. Pero eso nunca quiere decir triste.

– Como compositor y narrador de historias de naturaleza humana. ¿Dónde encuentra la inspiración? ¿Hay temas recurrentes en sus canciones?

– Como muchos compositores, puedo preocuparme porque básicamente estoy escribiendo el mismo par de canciones una y otra vez; pero creo que la verdad auténtica es que sólo hay unos pocas cuestiones y temas que continúan involucrando a todos nuestros corazones y mentes: las relaciones con el amor, la pérdida, el miedo, el perdón y cómo vivir con firmeza y honestidad a pesar de saber que no siempre lo haremos.

– ¿Qué escritores le han marcado como letrista? ¿Alguno autor o poeta en lengua española?

– Además de autores anglosajones como Raymond Carver, Wallace Stevens, J.D. Salinger, Nathanael West o Alice Munro, definitivamente Gabriel García Márquez ha tenido un impacto grande en mí. Cambió mi medida de lo que era escribir bien. Y podría decir lo mismo de Pablo Neruda. Y también he sido compositor devoto de Lorca, Julio Cortázar y Antonio Machado.

–¿Tiene algún proyecto a corto plazo que pueda revelar?

– Bueno, tengo una serie de proyectos en preparación de los que no tengo aún plena libertad para hablar, pero baste decir que mi ambición siempre es componer la canción que no he escrito. Grabar un álbum diferente a cualquiera que han sido fruto de mi trabajo colectivo y avanzar en mi andadura como intérprete.