Borrar
Pello Reparaz, posa con la sierra de Andia de fondo antes de la entrevista. Jose Mari López
Pello Reparaz: «Había 600.000 peticiones para comprar una entrada. El apoyo a ZETAK es espectacular»
Balance de Mitoaroa

Pello Reparaz: «Había 600.000 peticiones para comprar una entrada. El apoyo a ZETAK es espectacular»

La locura por los tres conciertos en Illunbe que dará el grupo en septiembre confirma el éxito del proyecto de Pello Reparaz: «Como me dijo mi abuela, sigo con los pies en el suelo»

Jon Agirre

Miércoles, 8 de enero 2025, 08:29

Con lo vivido en los dos conciertos de 'Mitoaroa' resonando todavía en su cabeza, ni Pello Reparaz ni ZETAK paran. Desde que lanzara la noticia del concierto de fin de gira de 'Aaztiyen' en Donostia, que al final será una triple cita en septiembre, sus teléfonos no han dejado de sonar. «Mejor ni miro las redes», bromea desde su pueblo en Arbizu. Más de 600.000 peticiones se acumularon en la cola virtual a primera hora para conseguir entradas. «Muy agradecido» por la acogida, Reparaz avanza que los conciertos de Illunbe serán «un paso más» en este proyecto al que dedica su vida.

– Sin terminar de salir del doble concierto de Mitoaroa en Pamplona, llega la triple cita de Illunbe para cerrar la gira de 'Aaztiyen'. ¿No hay descanso en ZETAK?

– Parece que no. Es algo con lo que estoy intentando convivir. ZETAK es un proyecto muy intenso, quizás porque yo también soy una persona muy intensa, no sé. Siento que estoy en un punto en mi carrera en que tengo mucho que decir, mucho que contar y mucho que transmitir. Y sí que es verdad que ese impulso, a veces, me lleva hasta la autoexplotación. Dedico mi vida al proyecto y eso me pasa factura en lo personal, también a nivel de salud mental en algunas ocasiones, pero soy consciente que muy poca gente puede sentir la satisfacción que estoy teniendo en los últimos años con el proyecto, pocos músicos se pueden permitir tener experiencias de este tipo.

– El feedback de Durangoko Azoka, los conciertos de la gira, Mitoaroa... ¿Ayuda a recargar las pilas y a equilibrar esa balanza?

– Ahora siento mucha energía para poder afrontar todo esto. Es evidente que si no hubiera una retroalimentación como la que estamos teniendo con el público todo esto no sería posible. Hemos salido a la venta y a las ocho de la mañana nos han llamado de musikaze.net -la ticketera para la venta de las entradas de Illunbe- para decirnos que había 600.000 dispositivos haciendo cola. Evidentemente te motiva sobremanera y dices, 'joder, este apoyo es espectacular'. Están premiando todo este trabajo, todo este esfuerzo que estamos haciendo, tanto yo como todo mi equipo, en los últimos meses y años. Es vital porque estamos haciendo música popular, que trata de dar y también de recibir, de que se genere algo en la población de Euskal Herria. Y en la de fuera, estamos llegando a otros lugares.

– Con 'Aaztiyen' buscó «hacer algo que solo se podía hacer en Arbizu». ¿Hace todavía más especial lo logrado? Con algo tan local lograr algo tan universal.

– Hito a hito seguimos demostrando que el discurso de la defensa de lo particular, de lo específico, de lo único, de lo que marca una identidad como la nuestra, no era un discurso vacío, era un discurso real. Cuando lo decía lo creía de verdad. 'Aaztiyen', como decías, solo se podía haber compuesto en Arbizu, un pueblo de mil habitantes en el norte de Navarra, que es algo muy único, muy específico, conectado con muchísima más gente que cualquier otro trabajo que haya hecho previamente.

– ¿Hacerlo todo desde el euskera, cómo se consigue?

– Lo que me legitima para hablar de la identidad es el euskera, es lo que me lleva a reflexionar, es lo que hay detrás. Pero ZETAK también es una defensa de los idiomas no hegemónicos. Y con este discurso muchísima gente se siente identificada. No tanto con el euskera, porque hay gente de Euskal Herria o incluso de fuera que no habla euskera que se ha acercado mucho a nuestro proyecto.

– Siempre se ha posicionado mucho: El Alarde de Hondarribia, animar a la gente a aprender euskera en AEK, etc. ¿No le preocupa esa sobrexposición?

– A veces siento cierta ansiedad. Pero ya son tantos los años que llevo expuesto, antes con Vendetta, tantos años recibiendo críticas de toda índole que empiezo a entender que es un mecanismo del ser humano, que ese odio gratuito es porque tienen que proyectar sus movidas en quien pillen. Algunas críticas son argumentadas, y esas las agradezco. Puedo vivir de lo que más me gusta, eso es alucinante. Por encima de todo está que todos los días puedo irme a la cama y dormir como un lirón. Nunca lo he perdido, salvo en un par de momentos por problemas personales. Estoy contento con mi obra, estoy contento con lo que aporto a la escena y me siento realizado como artista. Estoy contento y orgulloso de cómo estoy aprendiendo a gestionar a todo mi equipo y a la gente que rodea mi proyecto. Seguiré significándome, me critiquen o no.

– La transmisión de la cultura, del idioma, de esa identidad que mencionaba es uno de los pilares de ZETAK. El homenaje a Erramun Martikorena con 'Itzulera', que las generaciones más jóvenes sepan quién es, o la presencia de la mitología.

– Sí, esa foto de Erramun en Mitoaroa representa muy bien la transmisión que intentamos llevar a cabo con ZETAK. Es un proyecto que ha conectado con un rango y un espectro muy amplio de la sociedad, no solo de edades. Creo que es algo muy interesante. 'Itzulera' fue compuesta para Herri Urrats y es otra foto de nuestra aportación, ha sido algo muy notorio y no puedo estar más orgulloso de eso.

– En Vendetta y en ZETAK ha dejado huella con sus canciones, pero 'Itzulera' ha ido un paso más: se canta en conciertos, fiestas, bodas, actos de las escuelas... Ya no es solo su canción.

– Pasa con todas. Desde el momento en que es pública la gente hace de la canción algo distinto a lo que habías concebido. Con 'Itzulera' nunca me podía imaginar en lo que se iba a convertir y si ya no es mía, ha trascendido y se ha convertido en una especie de himno, no hay más que ver en nuestros conciertos. Cada vez que suena es una auténtica locura. Mi pasión es la composición de la música popular, escribir canciones. Es lo que más me gusta y es en lo que estoy centrado. Lo sentí por primera vez con 'Begitara Begira' y está pasando con 'Hileta Kantu Nafarra', la más escuchada de ZETAK en este momento. Me reafirma en escribir canciones.

– Hubo muchos invitados: Erramun, la reunión de Vendetta o el bertso de Jagoba Arrasate. ¿Tuvo Mitoaroa algo de autoregalo?

– Hay mucho de eso, sí. Especialmente en el último mes he estado muy pendiente de dónde se iba a colocar mi familia en el concierto. Pudimos reservar una grada muy cercana al B-stage, al escenario 2, que me parecía muy adecuado. Miro atrás y me veo en el Navarra Arena arropado por mi familia, Erramun, Maixux, todos los compañeros de Vendetta... Fue un lujo, se me pone la carne de gallina. Me hace sentirme orgulloso de cómo he construido mis relaciones, que a veces lo he hecho mejor, a veces lo he hecho peor, no hay duda. Pero mirando atrás prevalece esa sensación.

– La final del campeonato de bertsos de 2022 en Pamplona fue un hito. Con el euskera como bandera, ¿lograrlo siendo navarro lo hace más especial?

– Sí, evidentemente. Hay mucho de navarrismo en la decisión de hacer Mitoaroa aquí. En los discos puedo hablar de Mari o Aralarko dama, pero mi diosa es la intención creativa. Me gusta determinarla y después lo tengo en cuenta en cada uno de los pasos: en la composición, producción, preparación de los directos, el concepto o manifiesto de show, etc. Y en este caso todo bebe mucho del imaginario colectivo navarro. Mitoaroa podía haber sido en un lugar donde la demografía es mayor, como Bizkaia. Las entradas se venderían más rápido, pero creo que hemos acertado.

Se ha loado mucho Mitoaroa.

– Siento gran satisfacción, pero intento no mirar demasiado. Mi abuela siempre me repite 'mantén los pies en el suelo'. Están siendo días importantes para ese ejercicio.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Pello Reparaz: «Había 600.000 peticiones para comprar una entrada. El apoyo a ZETAK es espectacular»