Seis músicos vascos interpretan sus riffs preferidos de Metallica

Se puede decir más alto, con más reverb, incluso, pero no más claro: «Metallica fue la primera banda que me hizo descubrir y apasionarme por el mundo del rock y el metal». Josu Luengo, guitarrista de bandas como Evirus69 y en la actualidad del supergrupo de rock/metal Cobra, apenas tendría 10 años cuando descubrió a los californianos. «Me compraron la cinta de su último disco en aquel momento, '...And Justice for All'. Recuerdo darle vuelta tras vuelta a la cinta, continuamente; la escuchaba en un viejo walkman de mi padre que había por casa. Flipaba con cada canción», rememora. Poco a poco, Luengo fue interesándose por más palos de la música alternativa, del punk al grunge. Un par de años después de esa 'revelación' vital en el metal-rock, adquirió su primera guitarra. «Quería tocar como les veía hacer a todas las bandas de la época en los vídeos», confiesa. Tanto es así que una de las primeras versiones que empezó a tocar con su «primer proyecto de banda» con los amigos –«todos ellos fans de Metallica, por supuesto»–, fue, precisamente, 'Harvester of Sorrow', tema incluido en el álbum con el que el guitarrista vasco descubrió a sus queridos e inspiradores Metallica, '...And Justice for All'. Justicia poética.

Posiblemente sea uno de los fans más acérrimos de nuestros lares. La relación de Enrike Solinis con Metallica se remonta a su infancia, cuando empezó a tocar la guitarra clásica en el seminario, pues entonces no había posibilidad de cursar estos estudios en el Conservatorio. «A mí lo que más me interesaba era aprender a tocar heavy y rock con la guitarra, porque era la música que escuchaba, he sido muy jevilorro desde pequeño», admite con una amplia sonrisa. El líder de Euskal Barrokensemble se decanta por la mítica 'Seek and Destroy', incluida en el LP de debut ' Kill 'Em All' de comienzos de los 80, por una sencilla razón: «Utiliza unos elementos básicos de esa escala pentatónica de una forma muy inteligente; es muy simple, pero muy eficaz». Considera que las composiciones de Hetfield y compañía «son muy honestas», en el sentido de que el material empleado es muy básico y carece de la espectacularidad o 'pirotecnia' de otros grupos coetáneos y, sin embargo, su música posee una gran solidez. «Me parece algo muy bonito, conseguir esa fuerza a partir de elementos tan sencillos», apunta entusiasta, al tiempo que asegura que conforme pasa el tiempo, siente la música de Metallica «aún más honesta si cabe», pues empezaron «como unos chavales casi más cercanos al garage», comenta. «En la actualidad, me dedico a la música clásica, pero me sigo considerando heavy: en cuanto cojo la guitarra y enchufo los amplis, me salen estas canciones de Metallica de forma natural, están en mí; las aprendí de memoria cuando era un niño», reivindica.

Iñigo Etxarri, guitarrista de la banda guipuzcoana Liher, se considera bastante «noventero». Por eso ha elegido el álbum 'Load', que Metallica editó en 1996, y del que destaca el corte 'Until It Sleeps'. «A partir del 'Black Album', evolucionarían hacia otro sonido que en mi opinión se ve representado en este álbum», observa. En cuanto a la elección del tema, al margen del trasfondo «obviamente metalero», subraya el riff mismo, pues da pie a adaptarlo a cualquier otro estilo. «Me he dado cuenta de ello en cuanto me he puesto a sacar el riff con la guitarra acústica. Siempre digo que si se puede tocar en cualquier estilo, significa que es una buena canción –asegura–. Existen muchos riffs que si los sacas del género del metal, pierden el sentido. Pero en este caso, 'Until It Sleeps' es una canción que podríamos tocar tranquilamente en Liher, o Lide (Hernando) y yo juntos a la acústica, y creo que funcionaría en cualquier caso; por la composición y la armonía», sostiene el músico, que se encuentra en plena gira del último álbum de Liher, 'Eta Hutsa Zen Helmuga'. Asimismo, destaca el punto grunge, «nirvanero», del tema, «en el chorus, el punteo, o en la misma manera de tocar la batería, sin mucho 'machaque' en la estrofa… Todo eso también me gusta», concluye.

La bajista e integrante de la banda metalera Ilbarri –que canta en bizkaiera–, Ainara Grisaleña, tenía 15 años cuando escuchó por primera vez el tema 'From Whom The Bell Tolls' (del álbum 'Ride the Lightning', de 1984). Y al igual que los colegas que participan en este reportaje, «flipó» con el descubrimiento. Le picó la curiosidad por este grupo de Los Ángeles y empezó a investigar, «en la época había 'tráfico' de TDKs grabadas», bromea. Se queda con el 'Black Album' del 91. Y de ese disco, Grisaleña escoge 'My Friend of Misery'. ¿La razón? «Tiene una de las mejores intros de bajo de la historia de la música», defiende. Eso sí, a partir de este título, la bajista de Ilbarri perdió interés en sus siguientes trabajos y acabó perdiéndoles la pista del todo. «Dejé de escuchar lo nuevo que sacaban», admite. Grisaleña lleva tan solo un año tocando el bajo, por lo que a día de hoy continúa asistiendo a clases. Tal vez se anime a seguir uno de los tutoriales de Metallica para la plataforma Yousician, donde el propio James Hetfield revela la fórmula del éxito para tocar igual de bien que ellos. A priori, parece una regla sencilla: «La mejor manera para tocar como nosotros es tocar con nosotros», asevera el líder de Metallica en el vídeo promocional. El curso se basa en tres clases magistrales con todos los miembros de la banda, y un 'currículo lectivo' basado en 10 de sus canciones más emblemáticas. Todo ello por algo menos de 100€ «durante el primer año».

«Yo mi primera cinta ni la recuerdo, ¿tú, Almu?», se dirige la bajista de 4 Villains Eva Borbolla a la cantante de esta banda de rock y metal Almudena Hormaechea, más conocida como 'Malmudena'. «¡Yo era un moco!», exclama esta. «Tenía una cinta de cuando tocaron con la orquesta», se refiere a la colección 'S&M', publicada en 1999, en la que la banda de California se alió con la orquesta sinfónica San Francisco Symphony, dirigida por Michael Kamen. «Me la ponía en bucle como una loca», recuerda la voz de esta peculiar formación vizcaína, que se distingue por sus vistosos espectáculos en directo que ellos mismos denominan 'freak show', con una puesta en escena en la que mezclan temática post-apocalíptica y circense. Como muestra, este vídeo de su actuación en la bilbaína sala Azkena. Por su parte, la bajista Eva ha escuchado toda la discografía de Metallica, si bien no es un disco, ni siquiera una canción, lo que destaca de su relación con esta banda que llenará San Mamés este domingo 3 de julio: «La verdad es que no lo puedo evitar… Metallica me mola, pero (Robert) Trujillo… ¡Ay, Trujillo!», confiesa antes de estallar en sonoras carcajadas, en complicidad con 'Malmudena'. «¡Trujillo rocks!», conviene esta. Ambas están convencidas de que el concierto del domingo «va a ser un fiestón, ¡en Bilbao encima!», apuntan. Su entusiasmo lo trasladan a su interpretación del clásico 'Enter Sandman' en el vídeo sobre estas líneas, versión 'freak show'.

En cuanto le planteamos si estaría dispuesto a grabarse tocando su riff favorito de Metallica, Dann Hoyos no lo duda ni un segundo. Accede encantado, es una banda que le trae recuerdos musicales y familiares entrañables. «Cuando comencé a tocar la guitarra de niño, recuerdo la satisfacción que era interpretar a dúo con mi hermano. Era lo máximo el hecho de poder interactuar musicalmente y hacer sonar esas canciones que tanto nos alucinaban», evoca el músico, al frente de su propia banda Space Octopus, además de acompañar a Etsaiak en sus giras y dar clases de guitarra en la academia Muzzik de Bilbao. «Bien es cierto que los dos tocábamos muy justito –reconoce entre risas–, y sólo llegábamos a intros o riffs que repetíamos durante horas». Entre esas intros que ensayaban hasta la saciedad, seguramente se encontrarían «temazos míticos de Metallica como este 'The Unforgiven', baladón metalero del ya legendario 'Black Album', que Hoyos interpreta ahora con una sonrisa: «Con esta canción vuelvo a mi infancia, al recuerdo de los comienzos de todo, y quiero compartirlo con vosotros».