Kevin Weatherill, líder de Immaculate Fools: «El Reino Unido va de mal en peor»

Favorecido por la nostalgia ochentera y radicado Zamora, Lugo y Pontevedra, en 2015 reactivó la banda con músicos gallegos y británicos, grabando dos nuevos discos a los que pronto dará continuidad con nuevas canciones que, con nueva alineación, testará este sábado en el Kafe Antzokia ( 22.00 h 18/22 €) un Kevin que, como buen británico, sigue sin dominar el castellano «Lo hablo pero no tengo mucho vocabulario, he sido sordo muchos años pero mi oído va mejorando», bromea desde su retiro galaico.

¿Sigue viviendo alejado del mundanal ruido en aquella aldea de Pontevedra?

Sí, en Couto (de Abaixo, cerca de Cambados) voy a seguir para siempre aquí creo. Vine hace cuatro años y sigo haciendo vida de hombre de campo, lo llevo en la sangre ya que me crié en una granja. Tengo bodega y algunos animales, un par de cerdos, una cabra y aves de corral, pero no para comer, están a salvo. Siento que este es mi hogar, soy muy feliz llevando un vida sencilla y familiar con los pocos vecinos de la zona.

Lleva ya bastantes años en España. ¿Le quedan aún menos ganas de volver a Reino Unido con el Brexit?

«Yo abandoné mucho antes de que todo el proceso empezará, por varias razones. Lo vi muy claro y desde entonces el Reino Unido va de mal en peor. Pago mis impuestos en España y vote para permanecer en Europa, con la que desde que empecé a tocar fuera con los Fools siempre me he sentido conectado. Tengo aún pasaporte y nacionalidad británica pero espero poder cambiar eso en el futuro porque no tengo ninguna intención de volver. No tengo ningún sentimiento nacional, soy solo un inglés que vive en España.

¿Han cambiado Immaculate Fools desde su última visita?

Sí, un poco, esta vez tocaremos algunos clásicos y canciones nuevas en cuarteto, con Paco (Charlín) al bajo y otro batería español sustituyendo a Naima (Acuña) que ha vuelto al jazz, Phil Andrews a la guitarra y un excelente violinista británico en lugar de Helen (Watt). Habrá más presencia vocal y un sonido más desnudo pero poderoso en directo. Los Waterboys tocaron en Glastonbury y lo recuerdo como uno de los mejores conciertos que he visto.

¿Ha grabado ya esas nuevas canciones en un próximo disco?

Está grabado pero no acabado porque lo he hecho con el guitarrista original del grupo, Andy Ross, que vive en Australia y ello ha complicado la logística. La idea es sacar algún single hasta que esté disponible. La gente podrá escuchar alguna pero no llevárselas a casa.

¿Tendrá el enfoque ecléctico del anterior?

No tendrá la mezcla del anterior ('Keep the blade sharp'). Volver a trabajar con Andy después de 30 años me ha servido para comprobar que es un genio y nos ha hecho recuperar el sonido auténtico del grupo con base en el folk y el pop clásico pero grande y reconocible.

La producción de los dos primeros discos que hicisteis juntos fue sin embargo sintética y típicamente ochentera.

Es verdad, creo que no nos hacía justicia. Aunque, para ser sincero, soy fan del sonido de los 80. Creo que había grandes composiciones que se perdían por las modas en boga. Siempre he visto la composición como un arte que he sigo tratando de cultivar lo mejor que puedo. Antes que cantante o guitarrista me considero cantautor. Es con lo que más disfruto y lo que creo que siempre he hecho mejor, aunque con los experimentos de los dos primeros discos la cosa se difuminara un tanto. En esa forma de componer más clásica es en la que estoy centrado con Immaculate Fools, aunque también me gusta el blues primitivo que es parte de mi formación musical.

¿Sigue cultivando el blues como Dirty Ray?

Sí, lo he venido haciendo con Paco pero ahora que hemos recuperado nuestra relación, quizás vuelva a hacer algo en esa línea con Andy (Ross) que sigue componiendo y siempre está abierto a experimentar con todo tipo de músicas en su labor como productor de éxito en Australia.

¿Se han convertido Immaculate Fools casi en un proyecto personal? ¿Algo parecido a lo que pasa con Mike Scott y los Waterboys con los que siempre han tenido bastante que ver?

Como en su caso me gusta tocar con muchos músicos distintos aunque no llegó a los cerca de 80 que creo que han pasado por los Waterboys, yo debo andar por los 30. Aunque al mismo tiempo también me gusta contar con un núcleo de gente de confianza que se que no me van a dejar tirado. Supongo que en ambos grupos tienen una identidad que está por encima de los componentes

Reactivó el grupo hace casi cinco años. ¿Qué balance hace del regreso de Immaculate Fools?

Lo mejor ha sido comprobar que la gente no se había olvidado de nosotros, y que aún contamos con una base de fans muy fiel que compra nuestros discos y vienen a los conciertos. Por supuesto no tiene nada que ver con la locura que fueron los 80 para nosotros en España. Todo ha cambiado mucho pero está bien, no puedo quejarme.

¿Por qué cree que triunfaron en España y no en Reino Unido?

Con nuestro primer disco tocamos en casi todos los sitios posibles de Londres y alrededores, así que decidimos salir a Francia, Alemania y luego a España. La respuesta que desde el primer concierto que dimos en Madrid en el 85 lo cambió todo y comenzó nuestra relación de amor con el público español. Bruce Springsteen dice que España es la mejor audiencia del mundo y tiene razón. La gente responde tan bien que te lleva a entregarte más para dar lo mejor de ti en cada show. Aparte de todo me encanta el país y sus diferentes culturas.

¿Presta desde su aislamiento rural gallego atención al pop actual?

Tengo los oídos abiertos y sé que hay mucha música buen música pero me resulta difícil prestar mucha atención. No es como cuando nos limitábamos a la radio. En todo caso conozco alguna banda joven muy buena como My Baby, un dúo de Amsterdam de hermanos, chico y chica de origen neozelandés, que hacen un blues abierto al pop, el country y la música de baile pero con mucha guitarra, toqué con ellos en Gales y creo que son geniales.