El Capitán Elefante: «Cualquier sitio al que mires un poco da para una canción»

Las letras, aparentemente tamizadas con el día a día, concatenan diatribas varias (la inaugural 'Contigo no hay paz', con versos tipo «que se estrelle tu avión, o te descuartice la mafia»), agobios urbanitas, relaciones tóxicas, cuadros psicopáticos (desde los de 'I am Bukowski' hasta los de 'Una tarde tranquila', pasando por los de 'Canción truculenta', la de «te sacaré las tripas y apretaré los nudos») e intertextualizaciones (los otros títulos de canciones y versos reconocibles empotrados en 'Interferencias').

Todo un turbión de mensajes puede que pesimistas, pero paladeables, cuando menos audibles, y que rulan a ritmo de pop-rock, de contemporaneidad ora U2 (la de 'Asuntos exteriores', ¿no?) ora Radiohead ('El sindicato de robots'), de indie robusto ('Remolinos y arenas movedizas') y hasta de ondas bailongas (las de 'Harry cabeza de perro').

Hala, que el líder Javier Marcos, cantante y guitarrista de El Capitán Elefante, nos ponga al día.

El sábado 28 de enero disteis en la sala Azkena de Bilbao el último concierto del anterior álbum, 'Electroconfort' (2019), y menos de dos semanas después ve la luz vuestro nuevo disco, 'Asuntos exteriores'. ¿Es vuestra actividad como grupo un no parar, algo así como el 'never ending tour' o gira eterna de Bob Dylan?

La idea es esa, no parar. La andadura del anterior disco se alargó demasiado por culpa de la pandemia y teníamos ganas de finiquitar esa etapa y empezar una nueva. Pero no queríamos despedirlo sin estar seguros de que lo íbamos a poder organizar en condiciones óptimas de aforo en las salas, con la gente de pie y sin mascarilla. Esperemos que dure mucho esta 'normalidad' y este 2023 no nos sorprenda con una invasión alienígena o algo así.

¿Y cuando no estáis con el grupo a qué os dedicáis? ¿Veis pelis, vais al fútbol, hacéis deporte, leéis libros, atendéis a la familia…?

Pues sí, un poco de todo eso que nos dices. Lo que hace la gente normal. Todavía no nos ha dado por hacer cosas raras. Y dormir también. Nos gusta mucho dormir porque tenemos bastante sueño atrasado.

¿De qué curráis cada uno de vosotros?

Somos músicos. El problema que tenemos es, que por desgracia, el sueldo de músico en este país no da para vivir y tenemos que pluriemplearnos para pagar la hipoteca y las facturas de luz. No hace falta que digamos a qué precio está el kilovatio...

¿De qué curráis, si se puede saber?

Hay un poco de todo: técnicos, ingenieros, informáticos y camioneros.

Ajá… Ninguno espía, ja, ja… ¿Sois muy observadores? Eso parece a tenor de vuestras letras. ¿Cantáis de cosas reales como la vida misma?

Hay canciones con las que mucha gente se siente identificada o al menos eso nos cuentan. No sabría decirte exactamente en qué momento empiezan a gestarse las letras. Puede que lleguen desde cualquier sitio: una noticia en la televisión, una pareja en el tren, un libro... Creo que a cualquier sitio al que mires un poco da para una canción. Las ciudades están llenas de historias de todo tipo.

Vuestras letras parecen entre cínicas y enfadadas, pasando por esas con rabia contenida. ¿No hay esperanza en el género humano, en la vida urbana…? Ahí tenemos la letra de vuestra canción 'Una tarde tranquila'.

En esa canción tratamos el tema del suicidio, la apatía y la depresión, algo de lo que todavía no se habla abiertamente en los medios de comunicación y que por desgracia se ha disparado desde que empezó la pandemia. El consumo de ansiolíticos y antidepresivos es una auténtica salvajada. No sé qué coño es, pero como sociedad hay algo que estamos haciendo muy mal. Se supone que deberíamos disfrutar de la vida y ser felices sin tener tantas cosas materiales, pero interesa vendernos otra moto.

Pues ahora nos están vendiendo la moto de que con poco o nada serás feliz. Ahí están desde la Agenda 2030, espero acertar con el número, o la serie 'Apagón'. Otra cosa: ¿esa sentencia que cantáis de «la culpa la tienen los libros» es realidad o ironía?

Ja, ja, ja… En el caso de esa canción es literal: el protagonista acaba creyéndose Charles Bukowski y acaba actuando como él.

Javier, ¿qué estás leyendo ahora?

Acabo de terminar 'Que nadie duerma' de Juan José Millas, muy bueno, y estoy con '4 3 2 1' de Paul Auster.

Hum, yo estoy una biografía de Elvis y además ando acabando el libro 'Rusia' de Antony Beevor, sobre la gran guerra civil comunista soviética, y empezando 'Jazz para el nuevo siglo' de Nate Chinen. Cambiemos de tema y no te enfades: menos mal que ya no sales a escena con camiseta sin cuello, como apareciste por televisión en los conciertos de Radio 3, que te vio toda España…

Ja, ja, ja, ja… Que me vio toda España....

¡Más bien todo el mundo! En este nuevo disco hay un cuidado especial en la indumentaria, ¿verdad? Vestís de plata brillante en la foto promocional y en el reciente videoclip de la canción 'Déjame en paz' vuestra ropa cambia de color. Además en la despedida de 'Electroconfort' en el Azkena ya usasteis dos ropas, primero los cuatro en rojo y en el bis reaparecisteis de verde.

Lo hemos hablado entre nosotros y creemos que la gente paga una entrada por ver un espectáculo. Creemos que el público lo merece. Si vas a ver una obra de teatro, esperas que los actores estén caracterizados del personaje que representan y no vestidos como cuando van a hacer sus compras al supermercado. Y al final nosotros es lo que hacemos: contar historias en forma de canciones. Actuar en directo es un momento especial y los humanos nos solemos vestir de forma especial para situaciones especiales.

Jo, cuánta razón tienes. Hay quien alega que en los conciertos solo importa la música, pero para eso te oyes el disco en casa y no sales. Otro asunto: ¿Cuál suele ser el sujeto de vuestras canciones? ¿Más mujeres («ella llegó del planeta de los precipicios…»), más el narrador o cantante, o sea tú Javi, a veces robots…?

El otro día nos entrevistaron desde Nueva York. Una radio que pincha música en castellano de todo el mundo. Nos comentaron que nuestras canciones les parecían películas. A veces de ciencia ficción o con un toque años 50, y todo visto siempre con un toque irónico y ácido.

Vaya respuesta, pareces un político...

Bueno, el sujeto de las canciones no necesariamente soy yo. A veces son pensamientos propios y otros ajenos. Por supuesto que todo nace de nuestra perspectiva de la vida, pero también tenemos historias de ficción y reales. Reales como la del encuentro con un ser extraterrestre, que es algo que pasó de verdad, ja, ja, ja...

¿'Asuntos exteriores' es un disco de pop o de rock? No vale responder de pop-rock. Es que creo que en disco sois más pop pero en vivo más rock.

Es algo que nos han dicho desde el primer disco, que sonamos mucho más rock en directo. En un estudio está todo más medido y correcto y estás más pendiente de que todo quede en su sitio. En directo estamos mucho más asilvestrados y supongo que eso acaba notándose. Somos un grupo de directo.

¿Qué tal el estreno del disco de 'Asuntos exteriores', el primer concierto de la gira, el sábado pasado en Madrid, en la sala El Sol?

La gente respondió muy bien. Cantaron y bailaron los singles que ya habíamos adelantado y escucharon con orejas brillantes el resto de temas. Estábamos un poco nerviosos porque era la primera vez que tocábamos este set list y no sabíamos cómo iba a responder el público. Pero todo salió estupendamente, la sala sonó de diez y la gente salió encantada con el bolo.

Ojalá el sábado 6 de mayo podamos asistir al estreno en Bilbao, otra vez en el Azkena…

Sí, la sala Azkena nos encanta. Es un sitio muy acogedor y familiar, y Gaizka (el encargado) y el personal siempre nos hacen sentirnos como en casa. ¡Venir todos el día 6!

El nuevo álbum sale en redes y también en formato físico, ¿no?

Si, de momento hay copias físicas en Power Records, en Bilbao, y en Discos La Metralleta, en Madrid. Se distribuirá por más sitios, pero a quien se ponga en contacto con nosotros a través de redes sociales se lo enviamos a cualquier lugar de la galaxia.

¿Y os curráis el merchandising?

Estamos con ello, sí.