El cantante Giuseppe Malinconico aún con la casaca NATALIA ECHEVERRÍA

Break Free acelerando a Queen

El grupo tributo italiano a Freddy Mercury y los suyos apretó en la reinterpretación roquista para solaz de las 650 almas congregadas en el Euskalduna

Domingo, 26 de diciembre 2021, 18:32

Unas 650 almas, a 40 eurazos la entrada y entregadas a las palmas y a las ovaciones constantes desde el principio del repertorio, asistieron el sábado, Navidad, al Palacio Euskalduna para catar a Break Free. Grupo italiano de tributo a Queen que apostó por el ... roquismo desatado, en vez de por la emulación al milímetro que suele refrenar el ritmo de los tributos al uso, que suelen ir a una marcha por debajo del original.

Publicidad

Break Free dieron dos pases separados por un descanso de 15 minutos y aquí les contamos el primero, que arrancó puntualísimo y en 54 minutos seleccionó 10 piezas, incluyendo el solo guitarrista del final. El concierto, cuya celebración pendió de un hilo debido a la baja de última hora de su bajista, se llevó a cabo con un sustituto encontrado in extremis. Un bajista que tocó a menudo pendiente de una tablet con las partituras (un tal Lorenzo, en vez del titular Sebastiano Zanotto).

El arranque del show con 'One vision' resultó un tanto disonante debido al sonido embarullado, pero el cuarteto itálico no tardó en adaptarse a las inmensas dimensiones del Euskalduna y en aclarar su acústica y volar con dignidad propulsados por un baterista demasiado protagonista (Kim Marino), con muy buenas intervenciones del sosias de Brian May a la guitarra (Paolo Barbieri, quien presume de que su melena rizada es natural, de que no es peluca, como sucede con la mayoría de tributos de Queen). Y con un correcto clon mostachudo de Freddy Mercury (Giuseppe Malinconico) ataviado con casaca, luego con camiseta blanca de tirantes y en algún momento hasta con el torso desnudo (aunque a nuestra acompañante Natalia no le satisfizo el frontman y le criticó desde la altura física hasta el tejido de su pantalón pasando por su interpretación en sí, que no mereció tal correctivo).

Break Free nos hablaron en inglés, aceleraron hasta lo sorprendente 'We will rock you', en el rocabilesco 'Another one bites the dust' cosecharon las palmas del público predispuesto y 'Under pressure' tampoco les quedó mal. No se lucieron en el 'I want to break free', en el que el cantante apareció con peluca y pechos postizos para remedar a Mercury en el famoso videoclip de esta canción (aquí fue cuando acabó con el torso desnudo). Aportaron detalles singulares y personalidad propia al 'Don't stop me now' (donde insistieron con la petición de grititos al público, que se dejaba). La cima del primer pase fue otra pieza rocabilesca como 'Crazy Little Thing Called Love' (muy resultona a pesar del barullito sónico), y la gente disfrutó a modo del pianista 'Somebody to love'.

Publicidad

Al acabar el primer pase fuimos a ver a Cápsula en el Antzoki, previa escala en el bar Nave 9 del Museo Marítimo, donde actuaban los bilbaínos Debares, competente grupo tributo a AC/DC. Con buena base rítmica, joven guitarrista con movimientos a lo Angus Young, pero sin disfraz, más un veterano cantante con rajo que dio el pego en títulos tipo 'Shot down in flames', aunque parece que debe mejorar su inglés.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad