Urgente Grandes retenciones en la A-8 y el Txorierri, sentido Cantabria, por la avería de un camión
De Jorge sostiene que ya debería estar todo comprado, cocinado y congelado para Navidad.

«Es mejor que los cocineros estemos callados y la gente coma»

El chef David de Jorge expondrá su visión de la gastronomía en el Aula de Cultura de EL CORREO

Lunes, 11 de diciembre 2023, 00:11

David de Jorge asegura que no se cambia por todo el oro del mundo, que no quiere ser Elon Musk o Amancio Ortega. «Porque me gusta lo que hago y me satisface que la gente acuda a mi restaurante, contemple las recetas que explico en ... televisión y lea los libros que escribo», aduce. 'En un paraguayo cabe el Amazonas' es su última publicación y el motivo por el que protagoniza un nuevo encuentro del Aula de Cultura de EL CORREO, hoy, a partir de las 19.30, en el Salón El Carmen de Bilbao. Curiosamente, el autor critica la proyección mediática de su gremio. «Es mejor que los cocineros estemos callados y la gente coma», afirma. El acto, realizado en colaboración con Editorial Debate, cuenta con el apoyo de BBK.

Publicidad

Hoy, la gastronomía monopoliza estanterías de las librerías y buena parte de la parrilla televisiva. Incluso en este tiempo de crisis, la apertura de nuevos restaurantes no se ha detenido. «Proliferan, pero es que hablamos de un invento reciente, no tiene más de doscientos años», advierte y no cree que surja una lista Forbes dedicada a los chefs multimillonarios. «Creo que un trabajo honrado es incompatible con amasar una fortuna».

El autor arremete contra los tópicos y afirma que la alta cocina cansa. Todo con exceso agota, a su juicio, y apunta que muchos de los consumidores de platos exquisitos llegan a la mesa sin sed ni apetito. «Como zombis de experiencia y tontería», indica. «Se graban consumiendo caviar y dan lástima», lamenta y sostiene que él acude a los establecimientos de sus colegas para comer y gozar. «Hay un empacho mental penoso. Pero es algo que también sucede en los conciertos que los asistentes ven a través de una pantalla ¡Un espanto!».

En cualquier caso, lo cierto es que los maestros del arte de guisar se han convertido en verdaderos gurús. «También sucede en la literatura o la música», apunta. «Yo prefiero gente con sentido común, que ejerce su profesión y es referencia, pero que chapa y hasta otra. Otros desarrollan 24 horas de oficio y lo tienen muy creído. Quienes van así por la vida me dan pereza porque a mí me hubiera encantado ser otras cosas, jardinero o trompetista en una banda de jazz. Yo, cuando cuelgo el delantal, me zambullo en otras cuestiones».

Publicidad

Los «clientes tocapelotas con ganas de tangana» son objetivo también de su crítica. «Pero no son exclusivos, los ves en todas partes, en el ambulatorio y en la cola de la panadería. Se trata de gente egoísta que no pisa el suelo y que les falta entusiasmo», indica y señala que deberíamos ser más pueblerinos. «No lo digo en plan despectivo sino porque tendríamos otra actitud. En la gran ciudad encontramos gente muy encabritada por hacer cola para todo».

Llegar al cordero con ilusión

De Jorge identifica a este tipo humano por su forma de aparcar, «en mitad de una raya, fastidiando dos plazas». Afortunadamente, no es lo habitual. «Abunda justo lo contrario, el entusiasta que sale contento, pero triunfar con los cruzados es más satisfactorio, es como cortar dos orejas y rabo.

Publicidad

Su última obra tampoco deja bien parados a los de su profesión. Entre otros adjetivos, los tacha de pelmas, mentirosos y cursis. «Pero también añadiría que generosos y currantes», sostiene y aporta razones para explicar la continua exposición mediática. «Hemos pasado de las catacumbas, de sudores y dormir bajo el fogón a ponernos un micrófono en la boca».

Además de sus reflexiones sobre el oficio de cocinero, David de Jorge expone en su libro una guía de lugares para disfrutar. «Me encantan las barras de los bares y las terrazas de las tascas, los restaurantes de carretera o polígono», confiesa y reconoce que, a veces, se desvía hacia pueblos por el placer de descubrir la hostelería local. «Descubres tabernas alucinantes y disfrutas con un botellín de cerveza y unas aceitunas, viendo cómo discurre el día».

Publicidad

La Navidad está al caer, pero el autor sostiene que sus correspondientes demandas ya habrían de estar satisfechas. «Ya debería estar todo comprado, guisado y congelado», advierte y aboga por ser más prácticos. «Tiro por un redondo o unas carrilleras, y no ejercer de Ferrán Adriá cuando viene tu suegra o la cuñada». Asimismo, no es partidario de imitar las bodas de Canaan. «Tenemos que llegar al cordero con ilusión», aconseja el gastrónomo televisión.

La charla

  • Ponente. David de Jorge, experto en gastronomía.

  • Lugar y hora. Hoy a las 19.30 horas en el Salón El Carmen de Bilbao.

  • Con la colaboración: Fundación BBK.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad