Ignacio Goitia despliega su universo estético en Santander

Las once obras, en gran formato, han sido seleccionadas por el creador y remiten a series emblemáticas que determinan su evolución. «La disposición es austera y juega con la vertiente escenográfica de la sala, donde también se llevan a cabo representaciones teatrales», explica. El montaje se desarrolla mediante paneles blancos sobre fondo negro, «como si las piezas aparecieran entre bambalinas». Las características jirafas inician un periplo que desemboca en el momento presente. Los animales, que aún hoy constituyen la primera seña de identidad de su pintura, curiosean entre arquitecturas urbanas o aparecen en escenarios palaciegos. El resultado es un juego de descontextualización y extrañamiento que ha proseguido en trabajos posteriores, dotados de una lectura más social y política, amalgamada con su peculiar ironía y el virtuosismo formal.

La marginación, asunto que ha abordado en numerosas obras, también se puede hallar en la relación de piezas. La exposición cuenta con 'En el Palacio de Justicia de Bruselas', uno de sus lienzos más representativos de esta vertiente. En su heterodoxa interpretación, el magnífico edificio acoge a diferentes grupos de mujeres ataviadas con el burka, quizás demandando la aplicación de unos derechos que se les niegan. Goitia también incluye ejemplos de la 'Suite Basque', estudio del impacto de la globalización en la cultura más folclórica y costumbrista.

Su obra, presente en numerosas colecciones privadas nacionales e internacionales, ha experimentado una gran proyección tras sus últimas citas en Bilbao, Roma y Lisboa. Además de contar con su propia tienda en la capital vizcaína, prepara una exposición que abrirá sus puertas el próximo año en México DF. «Estoy en una fase en la que me apetece investigar tanto en proyectos propios como ajenos», asegura el pintor.