Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
ricardo aldarondo
Viernes, 20 de julio 2018, 00:30
Siempre se le calificó de transgresor y osado, y cada vez lo parece más. No solo resulta insólita la filmografía de Eloy de la Iglesia (Zarautz, 1944 - Madrid, 2006), también lo es su propia vida, en parte espejo de la realidad que retrató ... en tiempos turbulentos y contradictorios, también excitantes, peligrosos y creativos, los del final del franquismo y la Transición. Ahí encontró Eloy de la Iglesia el clima para enfrentarse a todos los tabúes con su cine y para retratar la realidad con una mirada valiente y provocadora. Sexo de amplias variantes, drogas, delincuencia, corrupción política, degradación urbana, crisis de fe, éxtasis y muerte se interrelacionan en su cine o en la parte más característica, porque también hizo películas de terror y crímenes, y hasta una adaptación de Henry James, 'Otra vuelta de tuerca', estrenada en el Festival de San Sebastián de 1985, que once años más tarde le dedicó una retrospectiva.
Todo eso y muchos otros pliegues de un cineasta único y rompedor, con todos sus aciertos y desequilibrios, queda reflejado en la exposición 'Eloy de la Iglesia, oscuro objeto de deseo', que ayer se inauguró en Artegunea, la sala de Fundación Kutxa en Tabakalera, en presencia de algunos de actores que trabajaron con él como María Luisa San José y Asier Hernández. La exposición estará abierta hasta el 4 de noviembre, con entrada libre.
El fotógrafo Pedro Usabiaga ha comisariado una exposición en la que se reúnen fotografías relativas a los rodajes y la producción de cada una de sus películas «nunca vistas en un 70%», además de objetos personales del autor y contribuciones de diversos artistas sobre su obra. «Hemos podido conseguir en la Filmoteca Española y la Filmoteca Vasca, y de algunos coleccionistas ingleses, negativos de fotografías que no se conocían para reproducirlas a gran tamaño», destaca Usabiaga, que considera a Eloy de la Iglesia «un cineasta masacrado por la censura en su época y por cierta prensa que le calificó de oportunista, y que en los últimos años está siendo muy reivindicado», por el valor de una obra que se atrevió a hablar en la Transición de feminismo y zoofilia en 'La criatura' (1977), de homosexualidad en la política en 'El diputado' (1978), de la inseguridad ciudadana y la corrupción en 'Miedo a salir de noche' (1979) y de la droga en 'El pico' (1983).
Usabiaga relató ayer los comienzos de un cineasta que, «cuando fue a Madrid para estudiar en la Escuela de Cine, no pudo entrar porque no cumplía aún la edad requerida». Pero enseguida comenzó a trabajar como guionista en Televisión Española, en la serie de adaptaciones de clásicos de la literatura 'Nuestro amigo el libro'. «Con su aprendizaje en el guion hizo su primera película, 'Fantasía 3'».
Algunas de las fotos más llamativas pertenecen a esas primeras películas que aún no tocaban temas tan escandalosos: la de José Legrá como protagonista de 'Cuadrilátero'; la de Carmen Sevilla aterrorizada en 'Nadie oyó gritar', las de 'La semana del asesino', todo un precedente de los 'serial killers', y la relación sexual sobre un suelo manchado de petróleo de Patxi Andion y Amparo Muñoz en 'La otra alcoba', casi una composición abstracta.
«Muchas de las películas de Eloy no podrían hacerse hoy, con toda la presión de lo políticamente correcto», apuntaba Usabiaga. Algunos ejemplos están en la escena en que unos chavales se desvirgan con una oca en 'El sacerdote', que cuenta una crisis de fe muy torturada, y la relación «muy especial» de una mujer con su perro que interpretaba Ana Belén en 'La criatura' y que «mezcla rasgos de feminismo con zoofilia».
La tormentosa relación de Eloy de la Iglesia con el joven protagonista de 'Navajeros' y otras cuatro de sus películas, José Luis Manzano, que se refleja en uno de los libros que se exponen, 'Lejos de aquí', de Eduardo Fuembuena; la insólita idea de hacer una película sobre una historia de amor entre un abertzale y un guardia givil, que se muestra en una portada de 'Egin' y en el guion que no se llegó a realizar; cartas, discos favoritos y fotografías personales, forman parte de este recorrido por un creador que «hoy es referente y modelo para jóvenes cineastas», dijo Ane Abalde, directora de la sala Kutxa Artegunea, en la presentación junto al director general de Fundación Kutxa, Ander Aizpurua.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.