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Del ser horripilante al en apariencia hombre normalillo posmoderno, imágenes del vampiro -reinterpretaciones, versiones y visiones- se han dado unas cuantas desde que el escritor Bram Stoker hiciera suyo el mito a finales del siglo XIX y lo catapultara a la fama. Pero como explicaba ... este miércoles la ilustradora Higinia Garay, por increíble que parezca, esta leyenda tantas veces narrada «aún sigue admitiendo nuevas visiones, es lo que la hace muy rica». De la suya y de otras 23, todas ellas firmadas por mujeres artistas (del mundo del cómic, la ilustración y el diseño gráfico, algunas de ellas relacionadas también con el audiovisual), se nutre la exposición que se inauguraba este miércoles en el Edificio del Ensanche como acto previo a la inauguración oficial de una nueva edición del festival de Cine Fantástico de Bilbao, el FANT, que comienza el viernes. No hay festival de terror o fantástico que no tenga su vampiro, por muchos nuevos terrores que vayan surgiendo -y en el último año hemos tenido algo de eso fuera de las pantallas-, y este no iba a ser menos.
El FANT estará abierto del 7 al 16 de mayo y la exposición 'Odol Tinta-Banpiroari Omenaldia', desde ya hasta el día 13 en horario de 08:00 a 20:00 horas y de forma gratuita. Es la continuación y la expansión, con nueva obra, de un proyecto producido entre la Semana de Cine Fantástico y de Terror de Donostia y el Festival de Sitges. La idea, que el vampiro, «mito clásico con el que todas hemos crecido», en palabras de Garay, fuera retratado por mujeres. «Es muy interesante que seamos todas mujeres porque el fantástico no se ha relacionado tanto con nuestra visión», explica. En esta etapa bilbaína, comisariada por Borja Crespo, aportan la suya la propia Garay, Quan Zhou, Raquel Alzate, Laura Pérez, Josune Urrutia, Ane Pikaza, Irene Márquez y Conxita Herrero, que se suman a las ilustraciones anteriores de Carla Berrocal, Natacha Bustos, Olga de Castro, Sara Bea Delgado, Genie Espinosa, Ana Galvan, Susanna Martín Raquel Meyers, Klari Moreno, Mamen Moreu, Mireia Pérez, Miriampersand, Ana Oncina, Ana Belén Rivero, Clara Soriano y de Sandra Uve.
Cada una de las 24 láminas de la exposición refleja un punto de vista distinto del mito del chupasangres; a veces aparecen sus víctimas, otras sus cazadores y otras versiones, de distintos estilos -de esa diversidad creativa da buena cuenta la muestra-, de la figura del vampiro, más o menos sutiles, más o menos sangrientas. Son, como describe Borja Crespo, un «reflejo actual del panorama del cómic y la ilustración», «visiones originales» que demuestran el «muchísimo talento, muchísimo femenino» que hay en el sector. Bajo el nombre de cada artista, hay una dirección web a la que recurrir para ver más trabajos de cada una.
'Odol Tinta-Banpiroari Omenaldia» es solo una de las actividades paralelas de un festival que, como dice su directora, Vanesa Fernández, intenta expandirse más allá de la pantalla «con una programación interesante y variada». De momento «viste de terror» el edificio del Ensanche y «da buena cuenta del nivel artístico que hay en la Villa».
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