Santiago Segura vuelve a salvar los cines con la tercera entrega de 'Padre no hay más que uno'

La jugada le salió redonda. Segura multiplicó su presencia en televisión presentando programas, apareciendo como invitado o participando en concursos –tal como hacía cuando recaudaba de esta manera dinero para sus cortos– y tras la titubeante 'Sin rodeos', con Maribel Verdú, dio en la diana de la taquilla con 'Padre no hay más que uno', la primera de sus comedias que podían ver sus hijas, Calma y Sirena.

Estrenada en el verano de 2019, la cinta era un remake de la comedia argentina 'Mamá se fue de viaje', de Ariel Vinograd, y contaba las peripecias de un padre de familia con sus hijos cuando la mujer le dejaba solo. Al año siguiente llegó la secuela, que insufló oxígeno a unos cines españoles que sufrían el cierre y las posteriores restricciones de aforo por la pandemia. Este 2022 ha presentado la tercera parte demostrando, de nuevo, que los exhibidores tienen mucho que agradecerle.

Estrenada el pasado jueves en 449 cines, el filme ha recaudado en solo cuatro días 3,1 millones de euros y llevado a las salas a más de medio millón de espectadores. Supera a 'Alcarrás', cine de autor en las antípodas del de Segura, que hasta ahora tenía el honor de ser la cinta española más taquillera del año con 2 millones de euros. Según Sony, distribuidora del filme, la tercera entrega de 'Padre no hay más que uno' es «el mejor estreno de una película española desde 2016» y supera a las dos primeras partes en un 78 y un 44% respectivamente.

«Tras unas semanitas complicadas, me levanto el día de mi cumpleaños con el mejor regalo imaginable: 350.000 personas han visto ya nuestra película… La tensión acumulada, las zancadillas y vicisitudes, hasta llegar hasta aquí, se diluyen ante esta apabullante acogida», tuiteaba Segura el pasado domingo, recordando un rodaje que no fue nada fácil por la pandemia.

Antonio Resines, que interpretaba al abuelo, enfermó por covid y permaneció más de un mes en coma ingresado en la UCI. Carlos Iglesias le sustituyó y la tensión acabó pasando factura al director, que cayó redondo al suelo al perder el conocimiento cuando quedaban dos días para el final del rodaje, un accidente que se saldó con doce puntos de sutura en una oreja.

A Santiago Segura le da igual que su última comedia transcurra en Navidad, en un homenaje a un clásico por antonomasia del cine familiar, 'La gran familia' (1962). Sabe que los chavales tienen vacaciones en estos meses y pueden ir al cine. Su tirón es superior a dos blockbusters estadounidenses como la última aventura de 'Los Minions' y 'Thor: Love & Thunder'. Por si fuera poco, el protagonista de 'El Día de la Bestia' regresará antes de que acabe el año con la secuela de '¡A todo tren! Destino Asturias', cuya primera película fue el filme español más taquillero el año pasado con 8 millones y medio de euros. Será el 2 de diciembre, cuando los críos estén de nuevo de vacaciones.