«No rodaría sobre la pandemia»

Y sigue en activo, porque ya tiene «mono» de rodaje. Le hace especial ilusión adaptar la novela 'Las tres bodas de Manolita', de Almudena Grandes, para convertirla en una serie de 10 capítulos que dirigirá con otros dos colegas, Imanol Uribe y Gracia Querejeta. Tampoco pierde de vista los documentales de temática vasca -como 'Bihotzez' y 'Athletic, un siglo de pasión', que le dieron muchas satisfacciones-, por eso tiene previsto estrenar en diciembre 'Olaeta, un siglo en danza'.

- ¿Rodaría una película sobre la pandemia?

- No, no. Me parece horrible. Hay cosas que no... Es una pesadilla.

- Algunas de sus películas de los 70 o los 80, ¿serían difíciles de estrenar ahora?

- Tendría problemas con 'Un hombre llamado Flor de Otoño', no porque fuera un anarquista travesti, sino porque quería matar al presidente. Y 'Akelarre' tampoco las tendría todas consigo. Ya en su día, en 1984, algunos la tacharon de «proetarra».

- ¿Qué piensa de la censura de lo políticamente correcto?

- Estoy en total desacuerdo. Pretender condenar una película como 'Lo que el viento se llevó' es absurdo. Como quitar el humo de las películas de Bogart.

- Usted sufrió lo suyo con las presiones del franquismo.

- Sí, sí, recuerdo que, en 'No es bueno que el hombre esté solo', no querían que López Vázquez viviera con una muñeca porque sí, sino porque le recordaba a su mujer. No debía ser una perversión sexual, sino otra cosa. Y, oye, la idea era buena. A veces el censor tenía ingenio.