Crítica de 'Todo el mundo odia a Johan' (2022): Un 'friki' nórdico

Es indudable que después de las parodias estrenadas últimamente, todo lo que huele a farsa resulta un 'dèjá vu'. Así que resulta difícil obviar esta vez la sensación de que la ficción juega con el espectador, no en vano este subgénero es el que más se basa en las expectativas del respetable para pasar un rato entretenido. De ahí la frustrante impresión que produce esta rareza, en la que es imposible dejarse llevar por la trama. Tal vez consciente de ello, su autor opta por echar mano de la tira de chascarrillos costumbristas, probablemente característicos de los habitantes de los aislados pueblos noruegos donde se desarrolla el, por otra parte, surrealista tinglado.