Las nominaciones alavesas en los principales premios cinematográficos

La selección de la laudiotarra, que en el último año ha ganado una treintena de festivales con su cortometraje 'Cuerdas', supone seguir «abriéndonos el camino unas a otras» y aspira a tomar el relevo de Carla Simón como ganadora de esa icónica estatua alemana. También ese raíl de proyección a nivel mundial recorre Beatriz de Silva, realizadora de 25 años que formó parte de ese selecto grupo de preseleccionadas para el Oscar, aunque finalmente no salió como candidata de la 'shortlist' anunciada este martes. «No ha habido suerte pero es una suerte haber llegado hasta aquí», señalaba De Silva, tras la decisión de la Academia de Hollywood, que es igualmente una de las grandes revelaciones del panorama nacional con 'Tula', un cortometraje multipremiado que narra con humor el encuentro de una limpiadora y una niña de 14 años en los baños de un colegio.

El apellido Urresola se repite en las quinielas para los Goya que se celebrarán el 11 de febrero en Sevilla como una de las favoritas. Al mismo tiempo, sigue acaparando premios por 'Cuerdas', una cinta de media hora en la que debuta la actriz no profesional Begoña Suárez, de 91 años.

Del circuito europeo hasta un radio cercano de figuras que van camino de convertirse en clásicos del cine español. Hoy, sábado, se festejan los Premios Feroz, donde sobresalen dos intérpretes alaveses, considerados un sello de calidad en cualquier rodaje. Karra Elejalde y Patricia López Arnaiz compiten por el galardón a mejor actor protagonista por 'Vasil' y mejor actriz de reparto en 'Intimidad', serie de Netflix que fue la más vista de habla no inglesa en la plataforma varias semanas. También en el apartado actoral, Mikel Bustamente opta al Goya a mejor actor de reparto por 'Cinco lobitos', dirigida por la vizcaína Alauda Ruiz de Azúa. En esta gran gala del cine español 'Irati', la segunda cinta de Paul Urkijo, opta a cinco estatuillas.

Este compendio de nombres es solo una muestra del empuje del audiovisual en la provincia. Seguramente, la generación más prolífica y la más brillante desde que Bajo Ulloa alumbrara en los noventa títulos como 'La madre muerta' –y reventara la taquilla con 'Airbag'– y los reconocidos trabajos de animación de Maite Ruiz de Austri.

Cintas como 'Ane' o 'Errementari' han avivado al sector. Si la variedad de géneros (drama, comedia, fantástico...) impide encasillarlos, la juventud sí que es un valor más de esta hornada. Ninguno de los cineastas –De Silva, Urresola, Urkijo o Sañudo– supera los 40 años. «Formamos una pequeña familia», apunta De Silva acerca de la buena relación que reina en el circuito. Los rodajes de los últimos años han servido como escuela. En el caso de Silva, había trabajado en 'Akelarre' (2020) y 'Baby' (2020) como meritoria y auxiliar de dirección. «Aprendí cómo funciona un set y entender la función de cada equipo», apunta. María Elorza, con 'A los libros y a las mujeres canto', y el amurriotarra Velasco Broca también llaman a las puertas de certámenes como el Festival Internacional de Cine de Rotterdam (IFFR) y el Slandance Film (Utah), respectivamente.

Al esperado largometraje de Urresola, que llegará a los cines el 21 de abril de 2023, se le suma 'Irati', de Paul Urkijo, que tiene varias butacas reservadas en la lucha por el Goya. Compite en las categorías de mejor guion adaptado (Urkijo), mejores efectos especiales (Jon Serrano y David Heras), mejor vestuario (Nerea Torrijos), mejor música original (Aránzazu Calleja y Mursego). Este estreno en salas se producirá el próximo 24 de febrero y es uno de los grandes eventos del calendario. Se trata de una de las producciones vascas con mayor presupuesto de la historia del cine vasco: ronda los 4 millones de euros.

La proyección en la gran pantalla de Vitoria como escenario ha contado con varios títulos en el último lustro como 'Errementari', 'Vitoria. 3 de marzo', 'La pequeña Suiza' o 'Ane'. Al talento se le ha sumado la creación de ayudas a nivel municipal y foral. Para «no quedarse atrás», en este momento los productores de Álava (también los de Gipuzkoa) piden equiparar los incentivos fiscales a los de la provincia a Bizkaia, que cuenta con ventajas más atractivas.